Piensa en un color, en uno sólo. Y ahora vístete con él. En un primer momento puedes llegar a pensar que vestir de un sólo color es una estrategia simple o aburrida, pero nada más lejos de la realidad. Optar por esta tendencia es de lo más sofisticado, elegante y arriesgado que puedas llegar a hacer. Una sola regla, si eliges un color, debes ir hasta el final con él.
Sin Respuestas