Hoy compartimos uno de los mejores anuncios a nivel emocional que hemos visto. Una campaña de Weigley (chicles). Posiblemente sea el anuncio más bonito y romántico de los que hemos visto.
La buena publicidad emociona y conmueve a través de la narración de historias, tratando de llegar al punto de que su público suelte ‘la lagrimita’. En esta ocasión lo ha conseguido (y muy bien) la campaña de Wrigley, una marca de chicles.
El anuncio cuenta la historia de amor de dos adolescentes que se conocen en el instituto. El hilo conductor, el chicle. El anuncio Gum Extra The Story of Sarah & Juan, comienza con la canción ‘Haley Reinhart: Can’t help falling in love’, muy bien escogida para acompañar las emociones.
Una historia preciosa que sino te engancha desde el principio, lo hará con el final.
Y es que los anuncios basados en las emociones emocional son sin duda los únicos que conseguimos recordar tiempo después.
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