¿Por qué es importante comer bien antes y después de la cirugía?
La cirugía va a hacer mella en el cuerpo del paciente. Una dieta bien balanceada antes y después del tratamiento para el cáncer de colon puede ayudar a acelerar la recuperación.
En las primeras etapas de recuperación, especialmente después de la cirugía, el intestino estará muy sensible y será necesario hacer pequeños cambios en la dieta.
La pérdida de apetito puede ser un problema para algunas personas antes del tratamiento, después de la cirugía, o mientras pasando por la quimioterapia o la radioterapia.
- Es aconsejable hacer pequeñas comidas nutritivas con frecuencia. Con el tiempo se podrá ser capaz de introducir de forma gradual la mayor parte de los alimentos que se comían antes de la enfermedad y de su tratamiento.
- Los alimentos ricos en proteínas pueden ayudar en el proceso de curación y también a disminuir el riesgo de infección de la herida. Alimentos ricos en proteínas incluyen carne, pescado, pollo, huevos y queso.
- Los hidratos de carbono aportan energía, muy necesaria después de la operación. Esto favorece la recuperación y algunas posibles complicaciones postoperatorias. Alimentos ricos en carbohidratos son las patatas, el pan, los cereales, el arroz y la pasta.
- Se recomienda seguir una dieta baja en fibra. Tomar demasiada fibra puede causar problemas de gases, distensión abdominal y diarrea.
- Mientras que el intestino se está curando es importante tomar alimentos que sean más difíciles de digerir. Estos podrían incluir frutas y verduras con cáscaras duras, o alimentos que necesitan se muy masticados para poder descomponerlos antes de tragarlos.
- La introducción de los alimentos debe ser gradual, y se puede necesitará algún tiempo para establecer un nuevo patrón de evacuación. Después del tratamiento para el cáncer de colon se producen cambios en el apetito o en la capacidad para disfrutar de ciertos alimentos y bebidas de las que antes solías disfrutar.
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