Síndrome Postvacacional: 6 consejos para superarlo

Sí, las vacaciones terminaron. Pero eso no significa que no puedas disfrutar de nuevo de tu rutina laboral. Verás cómo con estos pasos la vuelta al trabajo no será tan traumática. 

1. Un día puede significar mucho 

Mientras que muchos de nosotros tratamos de apurar hasta el último momento volviendo la noche del domingo, Laura Vanderkam, autora de «168 Hours: You have more time than you think» («168 horas: tienes más tiempo del que piensas»), sugiere algo muy interesante: «considera la posibilidad de volver el sábado en lugar del domingo».

Así habrá tiempo para que deshagas las maletas, hagas una pequeña compra básica y le des un vistazo al correo electrónico. Así disminuirás el impacto de la saturación del primer día. 

Día en la oficina

2. Llega a la oficina tan pronto como sea posible 

Contesta a esos correos que ya tienes controlados de ayer y prepara tu escritorio. 

3. Ten una rutina especial en la oficina para esa mañana 

Como un día normal pero mucho mejor: haces tus tareas, recuperas otras atrasadas y en tus ratos de descanso les echas un vistazo de nuevo a esas fotos que tan favorecid@ te sacan…¡vuelves a respirar las vacaciones! 

4. No programes ninguna reunión 

Volver de vacaciones ya es lo suficientemente duro como para estar de reuniones el primer día. Ya estarás bastante ocupad@ con lo que hay que hacer como para añadir más tensión al primer día. 

5. Haz un plan divertido y no muy tarde para cuando salgas del trabajo 

Una cena con las amigas para contar el viaje, unas cervezas con los compañeros y unas risas de cómo ha sido la vuelta al trabajo. No te puedes imaginar qué bien sienta una charla, unas risas y un buen vaso de vino para terminar el primer día después de vacaciones. 

6. Ve pensando en tus próximas vacaciones 

¿Y por qué no? Cuando tenemos un objetivo al que aspirar parece que el tiempo pasa más rápido. Además, sólo te aconsejo «que vayas pensando en tus próximas vacaciones»

Esta vez ya se han acabado. Ahora toca de nuevo la rutina y obligaciones. Pero hay tiempo para más vacaciones. Y habrán más.  ¿No crees que el ocio es más ocio cuando hay obligaciones por medio? Ahora a darle duro que ya vendrán otra vez las vacaciones. Cuando menos te lo esperes ya están aquí de nuevo. Ya lo verás.

¡Ojo!

No te olvides nunca de mirar el lado buenos de las cosas: si sufres de síndrome postvacacional es por has estado de vacaciones. ¡Qué suerte la tuya! Estar de vacaciones no es algo que todo el mundo se pueda permitir. ¡Disfruta de la vida!

Un gran saludo y un abrazo, Andrea.

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