Tener un bebé que se despierta varias veces cada noche es una de las principales quejas de muchos padres.
Al nacer, los bebés tienen un ritmo de sueño pautado casi exclusivamente por sus necesidades de hambre. Con el tiempo y la ayuda de algunas rutinas será capaz de distinguir el día de la noche, haciendo que adquiera un hábito de sueño-vigilia que se iguale bastante con el del adulto
Por regla general, los bebés menores de 12 meses se despiertan un promedio de 3 veces durante la noche. Durante los primeros meses de vida, la mayoría de los bebés lloran cuando se despiertan y necesitan que alguien los calme para volver a dormir. A medida que los bebés se van haciendo mayores, aunque sigan despertándose por la noche, ellos mismos suelen volver a dormirse, de hecho, a veces ni los padres se dan cuenta de que se han despertado.
Un bebé recién nacido tiene un estómago muy pequeño, que no tienen capacidad para almacenar la suficiente cantidad de leche para mantenerlos satisfechos durante mucho tiempo, por lo que necesitan comer cada pocas horas, independientemente de si es de día o de noche.
Los bebés amamantados pueden despertarse con más frecuencia que los bebés alimentados con leche de fórmula, ya que la leche materna es más rápida y fácil de digerir. Un bebé recién nacido normalmente suele tener hambre cada 2 o 3 horas. Probablemente, después de los 6 meses de edad, el bebé será capaz de aguantar entre 6-8 horas sin comer, aunque en algunos casos esto no es así.
¿Por qué algunos bebés y niños pequeños duermen toda o casi toda la noche y otros no?
Antes de unos 4-6 meses, la mayoría de los bebés necesitan comer por la noche, y se despiertan porque tienen hambre. A partir de los 6 meses, muchos bebés ya pueden aguantar toda la noche sin comer.
El problema es que en algunos casos, algunos bebés, cuando se van haciendo mayores, pueden desarrollar ciertos hábitos para volver a dormirse como ser alimentados (aunque no tengan hambre realmente), dormir en la cama con sus padres (colecho), que les den el chupete, les tomen en brazos, les mezan,…
Si su hijo se está despertando a menudo, algunas de las posibles causas son:
Antes de unos 4-6 meses, la mayoría de los bebés necesitan comer por la noche, y se despiertan porque tienen hambre. A partir de los 6 meses, muchos bebés ya pueden aguantar toda la noche sin comer.
El problema es que en algunos casos, algunos bebés, cuando se van haciendo mayores, pueden desarrollar ciertos hábitos para volver a dormirse como ser alimentados (aunque no tengan hambre realmente), dormir en la cama con sus padres (colecho), que les den el chupete, les tomen en brazos, les mezan,…
Si su hijo se está despertando a menudo, algunas de las posibles causas son:
- tener un temperamento difícil.
- la necesidad de ser alimentados durante la noche.
- la ansiedad por la separación. La ansiedad por separación es una razón muy común por la que los niños menores de tres años lloran durante la noche. A los 8 o 9 meses, los niños han aprendido que sus padres siguen allí aunque no puedan verlos, aunque en muchos casos se necesita un poco más de tiempo.
- estar incómodo por el pijama, porque tiene frío o calor, tiene sed o hambre, la cama está húmeda,…
- tener dolor, por ejemplo un dolor de oído, gases o está en periodo de dentición.
¿Qué hacer para que un bebé se acostumbre a que la noche y el día son diferentes?
Es importante enseñar al bebé la diferencia entre el día y la noche lo antes posible. Si sigues estas recomendaciones, pronto tu bebé aprenderá que la noche es para dormir.
- Durante el día:
- mantén las cortinas abiertas para que entre la luz.
- estimularlo. Aprovecha los cambios de pañal para jugar con él y acariciarlo.
- no te preocupes demasiado por los ruidos cotidianos cuando duermen.
- Por la noche:
- no enciendas luces directas. Si necesitas atenderlo, utiliza algún tipo de luz indirecta.
- mantén al bebé en un lugar tranquilo, evita los ruidos.
- intenta no cambiarle el pañal a no ser que sea necesario.
- no juegues con él.
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