Menopausia y despistes
La falta de concentración es un síntoma muy común en la menopausia.
La concentración afecta a la memoria, a la capacidad de atención y a la capacidad de procesar la información.
¿A qué se debe? ¿Hay algo que se pueda hacer para mejorar?
¿Qué causa la falta de concentración en la menopausia?
Son muchos los factores que pueden afectar a la capacidad de concentración, pero en el caso de las mujeres que se encuentran en la transición a la menopausia, la causa más probable es la fluctuación hormonal.
El estrógeno desempeña un papel clave en el funcionamiento del cerebro.
Hay una serie de moléculas en el cerebro llamadas neurotransmisores que regulan la función cognitiva, incluyendo la memoria y la capacidad de concentración. Si hay reducción de estos neurotransmisores, se produce una disminución de la función cognitiva, y por tanto un aumento de la dificultad de concentración.
El estrógeno afecta a la producción de algunos de los neurotransmisores del cerebro. Durante la transición a la menopausia, cuando los niveles de estrógeno comienzan a disminuir, la producción de neurotransmisores va reduciéndose. El estrógeno también estimula el flujo de sangre al cerebro
Además de las causas hormonales, muchas mujeres pueden tener problemas de concentración como consecuencia de otros síntomas de la menopausia.
- Los trastornos del sueño y el cansancio pueden hacer que una mujer esté demasiado agotada para concentrarse adecuadamente en las tareas diarias
- Los síntomas psicológicos como la depresión o la ansiedad también pueden afectar a la capacidad de concentración de una mujer
- El estrés también puede afectar
¿Cómo se puede mejorar la capacidad de concentración?
Algunos cambios en el estilo de vida pueden ser útiles para mejorar la capacidad de concentración de las mujeres en la transición a la menopausia:
- Llevar una dieta saludable rica en nutrientes, como el omega-3 y el omega-6
- Reducir el consumo de cafeína, alcohol y azúcar
- Intentar descansar lo suficiente
- Practicar técnicas para aliviar el estrés, como la meditación o el yoga
- Ejercitar el cerebro, como con los crucigramas