Una dieta alta en fibra permite reducir el riesgo de estreñimiento, el síndrome del intestino irritable y ayuda a prevenir el cáncer de colon
¿Qué es la fibra?
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Fibra soluble
Este tipo de fibra se disuelve en agua, formando un gel espeso en el estómago, lo que disminuye la velocidad de la digestión y de la absorción. Este tipo de fibra sirve de alimento a las bacterias intestinales y nutre a las células del intestino grueso, lo que parece que podría reducir el riesgo de desarrollo de cáncer. Se encuentra en alimentos como las manzanas, los cítricos, la avena, los guisantes, las habas y las lentejas,
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Fibra insoluble
Este tipo de fibra proporciona volumen a los alimentos, ayudándolos a pasar fácilmente a través del intestino, y permite retener el agua por lo que produce sensación de saciedad y por tanto reduce el apetito. La fibra insoluble desactiva las toxinas intestinales y su alto consumo puede disminuir el riesgo de cáncer de colon. Podemos encontrarla en alimentos como el salvado de trigo, los granos enteros y algunas verduras.
¿Cuánta fibra es suficiente? Los estudios sugieren que las mujeres deben comer 25 gramos de fibra cada día y los hombres 30 gramos de fibra cada día.
¿Cómo se puede aumentar el consumo de fibra en la dieta?
Se recomienda:
- Comer vegetales y frutas crudas
- La piel de las frutas es la parte que más fibra tiene
- Evitar hervir durante mucho tiempo los alimentos con fibra ya que puede perderse hasta la mitad del contenido en fibra
- La mejor forma de cocinar los alimentos es al vapor o salteándolos
- Comer sólo cereales integrales