Cada bebé experimenta la dentición de manera diferente.
Algunos prácticamente no tienen síntomas, mientras que otros bebés experimentan muchas molestias durante la dentición.
La dentición es la época en la que comienzan a aparecer los dientes de leche (también llamados dientes primarios).
Por lo general, el primer diente de leche sale alrededor de los 6 meses, aunque puede aparecer más temprano (3 meses) o más tarde (1 año). A los tres años, la mayoría de los niños tienen ya los 20 dientes de leche. En la mayoría de los niños, la erupción de los primeros dientes se produce sin complicaciones, pero en algunos niños puede aparecer un poco de malestar e irritabilidad.
¿En qué orden aparecen los dientes?
Los primeros dientes en aparecer suelen ser los dos incisivos centrales de la parte inferior, entre los 6 y los 10 meses. Le siguen los cuatro dientes superiores frontales (incisivos centrales y laterales) entre los 8 y los 13 meses, y los incisivos laterales en el maxilar inferior aparecen entre los 8 y los 16 meses.
Entre los 13 y los 19 meses comienzan a salir los primeros molares,y los cuatro caninos entre los 16 y 23 meses.
El segundo grupo de molares superiores e inferiores aparecen entre los 25 y los 33 meses.
Los dientes permanentes, o secundarios, por lo general empiezan a reemplazar a los dientes de leche alrededor de los 6 años, y lo hacen en el mismo orden.
¿Qué síntomas presentan los niños durante la dentición?
Los síntomas de la dentición en un bebé pueden incluir:
Aumento de la irritabilidad.
Colocación de objetos o los dedos en la boca y morderlos.
Aumento de la salivación o babeo
Pérdida del apetito o mayor selectividad hacia cierto tipo de alimentos
Encías sensibles e hinchadas
Erupción en las mejillas o enrojecimiento en el área de las mejillas cerca de las encías afectadas Inquietud
¿Cómo se pueden aliviar las molestias de la dentición?
Para aliviar las molestias de la dentición:
Masajear las encías del niño con un dedo limpio o con el dorso de una cuchara pequeña y fría
Que muerda algo frío (pero no congelado), como un anillo de dentición. Un anillo de dentición congelada puede dañar las encías.
Utilizar algún tipo de pomada especial para la dentición. Pregunte a su dentista o a un médico para que le recomiende el producto más adecuado.
La benzocaína, el principal ingrediente de muchos geles y líquidos de venta sin receta utilizados para reducir el dolor de la dentición en niños muy pequeños, se ha asociado con una enfermedad rara pero grave, llamada metahemoglobinemia, lo cual reduce la cantidad de oxígeno transportado por el torrente sanguíneo. Los productos con benzocaína no deben administrarse a niños menores de 2 años sin la supervisión de un profesional de la salud.
Si las molestias son muy fuertes, se puede dar paracetamol o ibuprofeno en dosis adecuadas a su edad.
¿Cuándo y cómo se deben cuidar los dientes del bebé?
El cuidado dental apropiado comienza incluso antes de que salga el primer diente. Porque no se vean los dientes no quiere decir que no estén allí. Los dientes comienzan a formarse en el segundo trimestre del embarazo.
Al nacer, el bebé ya tiene los 20 dientes primarios, algunos de los cuales ya están plenamente desarrollados en la mandíbula, aunque no hayan erupcionado todavía.
Es importante limpiar las encías por lo menos dos veces al día, después del desayuno y después de la última comida del día, con el fin de prevenir la acumulación de bacterias dañinas. Para limpiar las encías hay que frotar, con suavidad, con una gasa limpia y húmeda a lo largo de la encía superior e inferior.
¿Puede un bebé tener problemas de caries?
Si no se practican unos buenos hábitos de alimentación e higiene bucal los niños pueden sufrir de caries en edades muy tempranas.
Hábitos como hacer que el bebé se duerma con el biberón en la boca puede dañar los dientes, ya que si los azúcares de la leche permanecen mucho tiempo en los dientes, pueden corroer el esmalte.
¿Pueden nacer los niños con algún diente?
Algunos bebés nacen con uno o más dientes (dientes natales) o puede que le salgan en los primeros 30 días de vida (dientes neonatales). Por lo general suelen ser dientes extras, o restos de desarrollo neonatal.
El médico puede recomendar su eliminación si plantean un peligro de poder ser tragados por el bebé, si interfieren en la alimentación o si producen irritación de la lengua.
