La caída del pelo es uno de los efectos secundarios más temidos del tratamiento del cáncer
La quimioterapia es el tipo de tratamiento contra el cáncer que suele causar la pérdida de cabello.
Los medicamentos que se utilizan para el tratamiento del cáncer de colon pueden causar muchos efectos secundarios, pero estos van a depender de diversos factores como el tipo y la dosis de medicamento o la sensibilidad de cada persona a estos fármacos.
Es importante tener en cuenta que aunque la pérdida de pelo es uno de los efectos secundarios más aparentes en los pacientes que están siendo tratados para el cáncer, en el caso particular de la quimioterapia para el cáncer de colon no suele producirse la caída del pelo.
En algunos casos, sólo se observa que los cabellos se hacen más finos. Si el tratamiento para el cáncer provoca la pérdida de cabello, por lo general comienza dentro de 2 a 3 semanas de haberse iniciado, se produce de forma gradual y nunca repentinamente. Es importante recordar que una vez que el tratamiento de quimioterapia haya finalizado el cabello volverá a crecer una vez que su tratamiento de quimioterapia.
El nacimiento del nuevo pelo puede tardar varios meses, y puede tener un aspecto y un color diferente al que tenían antes del tratamiento. En pocas ocasiones, y cuando las dosis de quimioterapia son muy elevadas, puede que el pelo no vuelva a crecer después de haber terminado el tratamiento.
¿Cómo afrontar la pérdida de cabello?
La pérdida de pelo es uno de los efectos secundarios que más suele preocupar a los enfermos, sin embargo es importante recordar que se trata de un efecto pasajero y que el pelo volverá a crecer una vez acabados los ciclos de quimioterapia. En el caso de que el tratamiento para el cáncer de colon utilizado provoque la pérdida del cabello, podría ayudar:
- Visitar una tienda especializada en pelucas, antes incluso de empezar el tratamiento, para poder elegir una peluca que pueda coincidir con el color y la textura real del cabello.
- cortarse el pelo, o incluso raparse la cabeza, antes de comenzar el tratamiento. De este modo la pérdida de pelo no es tan angustiosa.
- Usar productos suaves para el cabello.
- Evitar las permanentes o las coloraciones ya que pueden dañar el pelo e incluso agravar el afinamiento del cabello.
- Evitar el uso de secadores de pelo, y de rizadores o planchas alisadoras de pelo.
- Usar sombreros, gorras, pañuelos… No todo el mundo quiere usar pelucas, por lo que en el caso de que el pelo se caiga con el tratamiento una solución sería cubrirse la cabeza.
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