¿Es buena la terapia hormonal sustitutiva?
La terapia hormonal implica la administración de hormonas sintéticas para reemplazar los niveles de hormonas que se han agotado en la mujer, y así aliviar los síntomas de la menopausia.
Su uso se ha relacionado con algunos riesgos, pero el debate sobre su relación riesgo-beneficio continúa.
Te contamos los beneficios de su uso.
La terapia de reemplazo hormonal (TRH)
Es un tratamiento que se da a las mujeres para ayudarlas con los cambios y los síntomas emocionales y físicos asociados con la menopausia.
Es eficaz en la reducción de los sofocos, del insomnio, del dolor de las articulaciones, la sudoración nocturna, la sequedad vaginal e incluso de los dolor musculares.
Hay dos tipos básicos de terapia hormonal:
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Terapia con estrógenos
El estrógeno es la hormona que proporciona el mayor alivio de los síntomas de la menopausia, y se prescribe para mujeres sin útero debido a una histerectomía.
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Terapia combinada de estrógeno más progestágeno
El progestágeno se agrega a la terapia con estrógeno para proteger a las mujeres con útero contra el cáncer uterino.
Plan individualizado para cada mujer
No existe una terapia única.
Se recomienda usar terapia hormonal a la dosis efectiva más baja durante el tiempo más corto posible.
La relación beneficio-riesgo es favorable para las mujeres que inician la terapia horamonal cerca de la menopausia (entre 50 y 59 años, por lo general), pero aparecen más riesgos con el tiempo desde la menopausia y con la edad.
Las mujeres con menopausia precoz antes de los 40 años sin antecedentes de riesgo de cáncer de mama pueden tomar terapia de reemplazo hasta la edad típica de la menopausia (cerca de los 51 años) si no hay motivos para no tomarla.
Beneficios de la terapia de reemplazo hormonal
Son muchos los estudios clínicos que muestran que la terapia hormonal ayuda eficazmente a mejorar algunos síntomas de la menopausia como:
- Sofocos
- Sequedad vaginal
- Sudores nocturnos
- Pérdida ósea
Estos beneficios pueden conducir a una mejoría en el sueño, las relaciones sexuales y la calidad de vida.
También ayuda a reducir las posibilidades de padecer una enfermedad cardíaca, excepto en mujeres de más de 60 años en las que parece que la terapia de reemplazo hormonal aumenta el riesgo de enfermedad coronaria. Y parece que también podría prevenir o retrasar la aparición de demencia o de la enfermedad de Alzheimer.
Pese a que la terapia de reemplazo hormonal tiene muchos beneficios, también se han descrito efectos negativos, por lo que antes de hacer uso de la TRH, siempre se debe consultar a un médico para buscar el tratamiento que mejor se adapte a cada caso particular.
Lecturas relacionadas:
- ¿Qué es el tratamiento hormonal sustitutivo?
- Algunas alternativas al tratamiento hormonal sustitutivo
