Los mejores alimentos para mantener tu hígado sano

Qué comer para tener un hígado sano

Seguro que es algo que nunca te has parado a pensar, pero ¿sabías que tu hígado es clave en el funcionamiento de nuestro sistema digestivo?

Todo lo que comemos o bebemos, incluido las medicinas que tomamos, pasan a través de nuestro hígado. Por lo que es muy importante cuidarlo correctamente para que pueda mantenerse saludable y hacer bien su trabajo.

Un estilo de vida saludable es la clave para mantener un hígado sano, y te vamos a contar qué alimentos no deberían faltar en tu dieta si quieres conseguirlo.

Qué comer para tener un hígado sano

Alimentos para mantener tu hígado sano

Avena

Los alimentos ricos en fibra pueden ayudar a que tu hígado funcione mejor. 

La avena es una gran opción. Además de ayudar a mantener un peso saludable, es una buena forma de evitar los problemas hepáticos.

Evita los alimentos grasos

Comer demasiados alimentos con alto contenido de grasas saturadas hace más difícil que el hígado haga su trabajo.

Con el tiempo, puede provocar inflamación, que podría acabar desembocando en una cirrosis

Brócoli

Si abundan las verduras en tu dieta ayuda a mantener tu hígado saludable.

Algunos estudios sugieren que el brócoli protege de sufrir un hígado graso no alcohólico.

Café

Puede tener algunos beneficios para el hígado.

Beber de 2-3 tazas al día puede proteger a tu hígado del daño causado por el exceso de alcohol o por una dieta poco saludable

También puede reducir el riesgo de cáncer de hígado.

Reduce el consumo de azúcar

Abusar de los alimentos dulces puede afectar tu hígado.

Una de las funciones del hígado es convertir el azúcar en grasa. Si abusas de los alimentos dulces, el hígado acaba produciendo demasiada grasa, y a la larga, podría acabar provocando un hígado graso

Té verde

Es rico en catequinas, un tipo de antioxidante que ayuda a proteger contra el cáncer de hígado

Frutos secos

Las nueces y las almendras son buenas fuentes de vitamina E, un nutriente ayuda a proteger contra el hígado graso.

Limita el consumo sal

Una dieta alta en sodio puede provocar fibrosis, que es la primera etapa de la cirrosis hepática.

Espinacas

Las verduras de hoja verde son ricas en un potente antioxidante llamado glutatión, que ayuda a mantener el hígado sano.

Arándanos

Contienen polifenoles, unos nutrientes que pueden ayudar a proteger contra la enfermedad del hígado graso no alcohólico, una enfermedad del hígado que que suele estar relacionada con la obesidad y el colesterol alto.

Otros alimentos ricos en polifenoles son el chocolate negro, las aceitunas y las ciruelas.

Limita el consumo de alcohol

Beber demasiado puede ser muy dañino para tu hígado. Con el tiempo, puede provocar una cirrosis.

Intenta limitar 1 bebida al día si eres una mujer o 2 al día si eres hombre.

Especias

El orégano, la salvia, la canela, el curry, el comino o el romero son buena fuente de polifenoles

Limita los alimentos procesados

Generalmente están cargados de azúcar, sal y grasa

 

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