Debido al estilo de vida que llevamos, nuestro contacto con las nuevas tecnologías, los alimentos que ingerimos, etc, cada vez resulta más difícil para nosotros conciliar el sueño. Puede que nos cueste dormirnos, o que nos despertemos a media noche, o que simplemente tengamos la sensación de no haber descansado.
Independientemente de la causa, la falta de sueño nos afecta negativamente y nos convierte en personas irritables, además de menos productivas y menos saludables. Afortunadamente para nosotros, existen algunas conductas que podemos adoptar, y cosas que podemos hacer durante el día, para mejorar la calidad de nuestro sueño por la noche.
Aquí tenéis 8 formas sencillas de mejorar tu calidad de sueño
1.- Disminuir o controlar el consumo de calorías
En un estudio de medicina llevado a cabo en la Universidad de Pennsylvania, se observo que las personas que más calorías consumían, tenían mayores posibilidades de experimentar problemas de sueño. También se observó que las grasas más saludables, en cambio, tenían un impacto positivo en el sueño de quienes las consumían.
2.- Consumir grasas saludables y evitar las no saludables
Las grasas animales no saludables reducen los niveles de orexina (encargada de regular los hábitos del sueño). Una falta de orexina se traduce en dificultades en el sueño y necesidad de dormir más durante el día.
Las grasas saludables (omega-3,aceites monoinsaturados, aceites poliinsaturados) ayudan a mejorar nuestra calidad del sueño. Podemos encontrarlas en los aceites de vegetales y frutos secos, o en los pescados grasos (como el atún, la sardina o el salmón).
3.- Tomar más magnesio y vitamina B1
Las deficiencias en magnesio y vitamina B1 están directamente relacionas con los problemas del sueño. La deficiencia en vitamina B1 causa una deficiencia en el magnesio, influyendo negativamente en nuestra calidad del sueño.
Podemos incorporar el magnesio a nuestra dieta con alimentos como los frutos secos, las verduras verdes, y los granos enteros. A falta de estos alimentos, un suplemento de magnesio y vitamina B1 puede ayudarnos a solucionar nuestros problemas.
4.- Evitar revolcarse y dar vueltas en la cama
Normalmente hacemos esto por falta de comfort. Algunas soluciones sencillas podrían ser cambiar las sábanas, el colchón, o incluso cambiar la temperatura de la habitación. Si por alguna razón seguimos con las vueltas y la sensación de incomodidad después de hacer eso, podemos levantarnos y caminar un poco, leer, o escuchar un poco de música tranquila y con volumen bajo.
5.- Exponerse al sol durante 30 minutos al día
Esto incrementa los niveles de serotonina, encargada de producir la melatonina, que mejora nuestro sueño de forma natural.
6.- Hacer ejercicio
Aunque solamente sean 30 minutos de andar al día (el tiempo que pasemos de camino al trabajo, haciendo la compra, o las tareas de la casa también cuenta), hacer ejercicio mejora nuestra calidad del sueño notablemente.
7.- No usar ordenadores, móviles, y iPads antes de dormir
La luz azul de nuestras pantallas reduce los niveles de melatonina en nuestro organismo haciendo que nos sea mas difícil conciliar el sueño
8.- Inspirar aroma de lavanda
Una investigación llevada a cabo en la Universidad de Southampton mostró que los adultos expuestos a un aroma de lavanda dormían más fácilmente y descansaban más. Más adelante observaron que el aroma de la lavanda incrementaba el sueño de ondas lentas (o sueño profundo) que ralentiza la frecuencia cardíaca y relaja los músculos.
Basta con verter unas pocas gotas de aceite esencial de lavanda en un pañuelo y colocarlo al lado de la almohada cuando vayamos a dormirnos, para que haga efecto.
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