Lo Pagán (Google Maps – Lo Pagán)
San Pedro del Pinatar- Mar Menor
Murcia (España)
El Mar Menor y sus singularidades
La Manga fue colonizada muy tempranamente por residentes extranjeros y españoles en los últimos cuarenta años. Ya casi no queda espacio. Más bien se trata de un atractivo brazo de mar colapsado por la enorme edificación que soporta. Su capacidad de acogida es limitada y muchos residentes se lamentan de la excesiva congestión que padecen. Un espacio excepcional que constituye una oportunidad perdida casi irrecuperable.
Sin embargo, la costa murciana que conforma el Mar Menor vuelve a resurgir como alternativa. Campos de golf tierra adentro, inversiones en nuevos proyectos… están haciendo resurgir pueblos que estaban perdidos en la memoria de los murcianos.
Lo Pagán, la joya del Mar Menor
Lo Pagán es una pedanía de San Pedro del Pinatar, municipio que ostenta una fuerte capitalidad dentro del espacio del Mar Menor murciano. Por los sesenta del siglo pasado era considerada la «playa de los pobres», mientras que la playa limítrofe de Santiago de la Ribera era la «playa de los ricos». Hoy el urbanismo ha unido ambas playas (Playa de la Puntica de Lo Pagán y Santiago de la Ribera.
Lo Pagán también está unido con la capitalidad de servicios de San Pedro del Pinatar. Dista diez minutos del aeropuerto de San Javier donde la compañía de bajo coste Ryanair ofrece en toda Europa ofertas de vuelos baratos a un bajísimo precios canalizando un gran flujo de visitantes hacia la zona procedentes de muy diversos países.
El redescubrimiento de Lo Pagán
En pocos años Lo Pagán se ha vuelto a poner de moda. Las gentes de toda la vida siguen disfrutando de sus hermosas playas de siempre (Playa de la Puntica y Playa de Villananitos) donde niños juegan sin peligros (mar adentro apenas cubre la cintura) y mayores se aprovechan del alto grado de sal, yodo y otros minerales de estas aguas. Aquí poco ha cambiado. La gente de Madrid sigue comiendo churros en el chiringuito que está al lado del «Venezuela» -un restaurante de toda la vida de Lo Pagán para arroces y pescados.
Pero Lo Pagán es hoy muy diferente. Ha creado su propia «Manga». Un espectacular paseo que nace del Molino de Quintín y la playa de Villananitos, conforma su propia playa de la Mota y permite casi «tocar» la Manga que se adentra en el Mar por Cabo Palos. Por el otro costado este paseo de casi tres kilometros (hasta el otro Molino de Calcetera) permite acceder playas de aguas de lodo natural próximas a las salinas. Su poder terapeútico ha sido para muchas personas un gran descubrimiento. Es un paseo peatonal único, excepcional.
Nuevos hoteles, restaurantes y el gran centro de talasoterapia
Todo está empezando a resurgir y ha reconvertirse en Lo Pagán. Los turistas de siempre ven como su entrañable villa de siempre empieza a acoger nuevos hoteles con talasoterapia (Hotel Barceló Lodomar) y el gran hotel del mejor centro de talasoterapia del mediterráneo español (Thalasia).
Los nuevos restaurantes con calificaciones en las guías empiezan a aparecer (como el Restaurante La Casa del Reloj donde vivió sus últimos días el Presidente de la I República Don Emilio Castelar). Las antiguas casas se rehabilitan o se construyen modernos edificios. Lo Pagán y San Pedro del Pinatar empiezan a ser uno de los centros más dinámicos de creación de empleo de toda la Región de Murcia.
Todo este milagro tiene que mucho que ver con las nuevas inversiones públicas. A la ya comentada del espectacular paseo mar adentro hacia La Manga del Mar Menor, se une en gran centro de talasoterapia Thalasia, considerado el mejor centro de esta especialidad de toda Europa. Thalasia posee 4.500 m2 para tonificar el cuerpo con los mejores tratamiento marinos: programas de belleza, áreas de deportes, zonas de descanso… Sus tratamientos van desde la hidrología médica a la fisioterapia más especializada.
Lo Pagán y el Parque Regional Salinas de San Pedro
La otra joya de la corona para Lo Pagán son Las Salinas de San Pedro, hoy Parque Regional. Allí es posible disfrutar de la presencia de multitud de aves migratorias desde flamencos hasta las más singulares y desconocidas. Una carretera permite meterse dentro del corazón del Parque y acceder a zonas desde donde es posible acceder a excursiones a pié.
Estos nuevos espacios se han abierto a los visitantes nuevos y los de toda la vida. Son estos últimos los que con sorpresa y agrado redescubren un grandioso mundo nuevo que estaba allí oculto, preservado…
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Viva San Pedro del Pinatar, i su kultura, jejeje. 😛