Si quieres adelgazar, conocer cómo funciona tu metabolismo puede ayudarte.
El Metabolismo hace referencia al conjunto de procesos que tienen lugar en nuestro cuerpo con los que obtenemos la energía suficiente para que nuestro organismo funcione, pero cuando nuestro objetivo es perder peso, estamos refiriéndonos al metabolismo energético o la forma en la que nuestro cuerpo consume calorías.
Te contamos algunas cosas importantes que deberías saber sobre tu metabolismo si quieres perder peso.
1. Conocer tu tasa metabólica basal
La tasa metabólica basal es la cantidad de calorías que el cuerpo necesita cada día para funcionar correctamente. Cuando se conoce cuántas calorías necesita nuestro cuerpo a diario, si queremos adelgazar, debemos conseguir que se cree un déficit de calorías aumentando la cantidad de ejercicio y modificando los hábitos alimenticios.
Pero es importante hacer esto dentro de unos límites, ya que si tomamos muchas menos calorías de las necesarias, conseguiremos perder peso rápidamente, pero a la larga el efecto puede ser contraproducente. Si nuestro cuerpo no tiene suficientes calorías para hacer funcionar correctamente, tratará de quemar menos energía para compensarlo.
2. Ganar masa muscular es la mejor forma de acelerar el metabolismo
El músculo es más activo metabólicamente que la grasa o el hueso, es decir necesita más calorías para funcionar. Por lo que el entrenamiento de fuerza aumentará la actividad muscular, y por tanto el consumo de calorías.
3. El metabolismo funciona mejor cuando se mantiene un nivel de azúcar en la sangre estable
Los alimentos ricos en hidratos de carbono y los alimentos ricos en azúcar aumentan los niveles de azúcar en sangre, pero también hacen que caigan rápidamente.
Hay dos formas de mantener unos nivel de azúcar en la sangre más equilibrados. Uno es mediante los hidratos de carbono complejos, que el cuerpo tarda más en procesar, y por tanto evita que se produzcan picos de azúcar en la sangre. Otra forma, es evitar comer carbohidratos o alimentos azucarado solos. Si se acompañan con otros macronutrientes, como las proteínas o las grasas, se consigue retrasar su absorción y digestión, y así se mantiene un nivel de azúcar en la sangre más estable.
La estabilización de los azúcar en la sangre es también la razón por la que se recomienda la importancia del consumo de varias comidas pequeñas repartidas a lo largo del día. De esta forma se consigue que no se produzcan grandes picos y caídas de los niveles de azúcar en sangre, que es muy importante para el control general del metabolismo y del apetito.
4. Dormir lo suficiente hace que el metabolismo funcione mejor
La falta de sueño provoca que el cuerpo produzca más cortisol, la hormona del estrés, que afecta al control de azúcar en sangre.
La falta de sueño también afecta a los niveles de la hormona grelina, que promueve el hambre, y a la hormona leptina, que reduce el hambre.
Se recomienda dormir entre 7 y 9 horas cada noche.
5. Beber mucha agua
Si no existe una adecuada hidratación, el cuerpo no puede funciona correctamente, lo que incluye que no quema correctamente las calorías.
6. El metabolismo se ralentiza con el envejecimiento
Esta es la razón por la que con el paso de los años se debe reducir la ingesta diaria de calorías para no engordar.
Se recomienda que las mujeres de entre 19 y 30 no ingieran más de 2.000 calorías al día, entre los 31 a los 50 años no sobrepasar las 1.800 cal/día y a partir de los 51 años no más de 1.600.
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