Se ha especulado mucho sobre los efectos de la victoria de España en el mundial de Sudáfrica 2010. En algunos diarios económicos se ha difundido la cifra de un crecimiento del PIB adicional del 0,7 % para el equipo campeón del mundial de fútbol (estimación del Banco ABN Amro en 2006).
Intentaré concretar un poco más este dato en tres vertientes económicas, algo que nos interesa a todos, dada la complicada situación de la economía española en esta coyuntura de crisis que padecemos con altos niveles paro, escaso o nulo crecimiento y riesgo de estancamiento… ¿Será posible que la economía española pase de un 0,1 % del primer trimestre al 0,7 o más?
Efectos económicos del mundial de fútbol en España
1. Los efectos directos en la «industria del fútbol». Este sector ha mostrado ser en los últimos años una muy potente industria en muchos países. A diferencia de Inglaterra, por ejemplo, los clubs españoles no han optado por salir a Bolsa y captar capitales en los mercados. A partir de ahora esto va a ser más fácil. Pero, en cualquier caso, el fútbol español pasa a ser referencia mundial, sus jugadores nacionales revalorizados y convertidos en grandes activos del marketing internacional. El mundial ha popularizado también la imagen de jugadores de otros países en equipos españoles. Como muestra, el uruguayo Diego Forlán, balón de oro y mejor jugador del mundial 2010 que juega en el Atlético de Madrid, y así muchos jugadores extranjeros del Real Madrid, Barça, etc. No se trata de ventas de camisetas y el merchandaising… El fútbol se ha convertido en un gran sector económico, un gran activo económico con capacidad para generar crecimiento por sí mismo a través de múltiples mecanismos, aunque no son nada desdeñables los derechos de explotación de una imagen mundial absolutamente impresionante.
2. La imagen de España tras el mundial (la «marca España»). Otro efecto o impacto económico relevante es el de la revalorización de la «marca» España tras el mundial. Ningún país del mundo podría permitirse un campaña de marketing como la que ha obtenido España en estas últimas semanas y especialmente en la final del campeonato mundial de fútbol celebrado ayer. Televisiones de todo el mundo retransmitiendo el partido y hablando de España. Más de 700 millones de tele-espectadores de todo el mundo. La popularidad de España ha ganado muchos enteros en todo el mundo, y esto debe tener repercusiones en el turismo, el sector inmobiliario, la venta de productos españoles de consumo… La «marca españa» y lo español han recibido un espaldarazo importante. La duda es si ¿lo notarán significativamente nuestras exportaciones? ¿responderán al alza algunas inversiones? ¿nos respetarán más los mercados internacionales si inducen un cambio de coyuntura o de expectativas?…
3. Autoestima nacional, productividad, cohesión social y optimismo. Son intangibles difíciles de medir. Pero el optimismo, la autoestima nacional, quizás tengan unos efectos, a tomar en consideración, en la productividad del trabajo, en la confianza de los consumidores (mayor consumo) e inversores y en los agentes económicos en general. España necesitaba noticias positivas, en el interior y el exterior. En todo caso, la situación política (el estatuto catalán, la falta de apoyos al Gobierno…) no presagiaban nada bueno, pese a los avances de la propia Administración en la reforma del sistema financiero (cajas), mercado laboral, reducción del déficit, etc. ¿han cambiado las cosas tras el mundial? Habrá que esperar algunas encuestas sobre el estado de la opinión pública.. pero hay quienes auguran una situación más desahogada…
Quizás el esfuerzo económico del gobierno con medidas impopulares, ha tenido una compensación inesperada.: España heroína mundial. Todo esto no sabemos si es el 0,5, 0,7 ó 1,5 del PIB. Lo único que deseamos es que ojalá que los efectos económicos del mundial se hagan notar!!!!
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