El día siguiente de haber estado en el parque de Doñana hicimos una excursión a Aracena. Estando en la provincia de Huelva, ¿cómo no te vas a acercar al centro neurálgico de la cría del jamón ibérico de bellota? La ciudad, en lo alto de la serranía que lleva su
Lo que sí estuvo bien de verdad fue el almuerzo. Fuimos al restaurante José Vicente, recomendado también por mi amigo Antonio y como siempre que le hago caso fue un gran acierto. Está situado en la avenida de Andalucía a la entrada de la ciudad cuando vienes de Sevilla, frente a un parque municipal. Comimos un revuelto de setas y jamón y después una presa de paleta ibérica y un lomo ibérico que estaban para chuparse los dedos. Al terminar de comer bajamos a la tienda de productos de la tierra que el restaurante tiene en la casa de al lado y compramos una jaula para guardar grillos, que este verano ha utilizado Rubén pero para guardar saltamontes y un licor de guinda fabricado en Higuera de la Sierra, que todavía no he probado.
Por supuesto antes de efectuar el regreso a Mazagón compramos unos surtidos de ibéricos de bellota en la primera tienda que encontramos y que no abrió sus puertas hasta casi las seis de la tarde.