18 Señales que confirman que eres emocionalmente inteligente
La Inteligencia emocional (IE) es ese «algo» intangible en cada uno de nosotros. Afecta a la forma en que gestionamos nuestro comportamiento, manejamos las relaciones sociales y tomamos decisiones que marcan nuestra vida.
Estas 18 señales te ayudarán a saber si eres una persona emocionalmente inteligente:
1. Tienes un vocabulario emocional rico
Todas las personas experimentan emociones, pero sólo un grupo selecto puede identificarlas con precisión a medida que las sienten. La investigación demuestra que sólo el 36% de las personas es capaz de hacerlo, lo que es un problema porque las emociones no identificadas pueden llevan a malentendidos, lo que conduce a decisiones irracionales y acciones contraproducentes.
Las personas IE controlan sus emociones porque entienden y emplean un extenso vocabulario emocional para hacerlo. Mientras que muchas personas simplemente dirían: «me siento mal», las personas IE dirán: «me siento frustrad@», agobiad@, confundid@…». Cuanto más específicas sean tus palabras, mejor visión tendrás de cómo te sientes exactamente, qué lo causó y qué hacer para remediarlo.
2. Tienes curiosidad por la gente
No importa si son extrovertidos o introvertidos, las personas IE tienen curiosidad acerca de todo el mundo que les rodea. Esta curiosidad es producto de la empatía, una de las características más importantes para una alta inteligencia emocional. Cuanto más te preocupes por los demás y por lo que les está pasando, más curiosidad tendrás sobre ellos.
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3. Abrazas el cambio
Las personas IE son flexibles y se adaptan constantemente. Saben que el miedo al cambio paraliza y es una amenaza para su éxito y su felicidad. Buscan el cambio en cada esquina y están dispuestos a pasarse a la acción para que ocurra.
4. Conoces tus fortalezas y debilidades
Las personas IE no solo entienden las emociones, saben en lo que son buenos y en lo que no. Tener una alta IE significa que conoces tus fortalezas y sabes cómo apoyarte en ellas para sacarles el máximo provecho mientras mantienes tus debilidades alejadas de ti.
5. Te has convertido en un buen conocedor
Gran parte de la IE se reduce a la conciencia social. O lo que es lo mismo, la capacidad de leer en los demás y entenderles. Con el tiempo esta habilidad te convierte en un conocedor excepcional. La gente ya no es misterio para ti. Les conoces, sabes qué hay en ellos y entiendes sus motivaciones, incluso las que se esconden bajo de la apariencia.
Puedes entablar relaciones verdaderas porque eres capaz de observar/leer en los demás sus emociones, facilitando el entendimiento mutuo y estableciendo relaciones cercanas.
6. Te cuesta ofenderte
Si tienes una idea sólida de quién eres, es difícil que alguien diga o haga algo que te ofenda. Las personas IE son seguras de sí mismas y de mente abierta. Hasta pueden burlarse de sí mismas y dejar que otras personas lo hagan porque saben diferenciar perfectamente el humor de la ofensa.
7. Sabes decir no (a ti mism@ y a otros)
Inteligencia emocional implica saber cómo ejercer el auto-control. Estudios realizados en la Universidad de California muestran que a mayor dificultad para decir «no», mayores probabilidades de sufrir estrés, burnout e incluso depresión.
Saber decir «no» es realmente un gran reto para muchas personas. «No» es un palabra poderosa pero no debes tenerle miedo. Cuando llega el momento de decir «no» las personas emocionalmente inteligentes evitan frases como «No creo que pueda» o «No lo sé seguro». Decir «no» a un nuevo compromiso honra a tus compromisos existentes y te da la oportunidad de cumplirlos con éxito.
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8. Te liberas los errores
Las personas IE se alejan de sus errores, pero sin olvidarlos. Mantienen sus errores a una distancia segura, donde ya no puedan afectarles pero sí serles lo suficientemente útiles como para servirles de referencia para su futuro.
Vivir en tus errores te hace ansioso y asustado. Olvidarte de ellos por completo hará que los vuelvas a repetir. El equilibrio radica en tu capacidad de transformar tus fracasos en pequeñas mejoras. Esto crea la tendencia de hacer bien de nuevo cada vez que te caes.
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9. Das y no esperas nada a cambio
Cuando alguien te da algo de forma espontánea, sin esperar nada a cambio, deja una gran huella. Por ejemplo, has tenido una interesante conversación con alguien acerca de un libro y la próxima vez que os veis apareces con ese libro en la mano para regalárselo. Las personas IE construyen relaciones fuertes porque piensan mucho en los demás.
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10. No guardas rencor
Las emociones negativas que acompañan al rencor son en realidad una respuesta de estrés. Simplemente con pensar en la situación conduces a tu cuerpo al mecanismo de supervivencia, lo que implica luchar o huir ante una amenaza. Cuando la amenaza es inminente esta reacción es es fundamental para tu supervivencia, pero cuando la amenaza es algo pasado experimentar ese estrés causa estragos en tu cuerpo y en tu salud mental con consecuencias devastadoras en el tiempo.
De hecho, los investigadores de la Universidad de Emory han demostrado que padecer estrés contribuye a la presión arterial alta y problemas del corazón. Aferrarte al rencor es aferrarte al estrés, y las personas IE evitan esto a toda costa. Dejar ir el rencor no solo te hace sentir mejor, también mejora tu salud.
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11. Neutralizas a la gente tóxica
Tratar con personas difíciles es frustrante y agotador para la mayoría. Las personas IE controlan sus interacciones con personas tóxicas manteniendo sus emociones bajo control. No permiten que la ira y la frustración alimente el caos. Tienen en cuenta el punto de vista de la persona tóxica y son capaces de encontrar soluciones y puntos en común. Manejan la situación racionalmente.
12. No buscas la perfección
Las personas saben que no existe la perfección. Y es que cuando la perfección es tu objetivo siempre tendrás una sensación persistente de fracaso que te da ganas de renunciar o reducir tu esfuerzo. Terminas lamentándote por lo que no pudiste lograr y lo que podías haber hecho. Cuando en realidad lo que tienes que hacer es avanzar, entusiasmad@ por lo que has logrado y lo que te queda por lograr.
13. Valoras lo que tienes
Tomarse tiempo para estar agradecid@ por todo lo que tienes no es algo que simplemente se deba hacer, también mejora tu estado de ánimo -reduce la hormona del estrés cortisol en un 23%. Las investigaciones realizadas en la Universidad de California encontraron que las personas que trabajaban a diario por cultivar una gratitud experimentaron un mejor estado de ánimo, energía y bienestar físico. Seguro que tuvo que ver con sus niveles de cortisol.
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14. Desconectas
Tomarse un tiempo para desconectar de todo es un signo de Inteligencia Emocional. Te ayuda a mantener el estrés bajo control y vivir el momento. Los estudios han demostrado que algo tan simple como desconectar del correo electrónico reduce los niveles de estrés.
La tecnología permite la comunicación constante y la expectativa de que debes estar disponible las 24 horas del día los 7 días de la semana. Pero debes aprender a desconectar y dedicarte a pensar simplemente en el aquí y ahora.
15. No tomas demasiada cafeína
Beber cantidades excesivas de cafeína provoca la liberación de adrenalina, y la adrenalina es la fuente de la respuesta de lucha o huida. El mecanismo de lucha o huida deja de lado el pensamiento racional en favor de una respuesta más rápida para asegurar la supervivencia.
Esto es importante cuando un oso te persigue, pero no tanto cuando estás respondiendo a un duro email. Las personas IE saben que la cafeína es un problema y no permiten que se lleve lo mejor de ellos.
16. Duermes lo suficiente
Cuando duermes tu cerebro se recarga literalmente. Las personas IE saben que su autocontrol, atención y memoria se reducen cuando no duermen lo suficiente. Por lo que hacen del dormir una prioridad.
17. Dejas de lado los pensamientos negativos
Cuanto más rumies los pensamientos negativos más poder les estás dando. La mayoría de nuestros pensamientos negativos son sólo eso: pensamientos. No son hechos ni han pasado nada más que en tu cabeza
Las personas emocionalmente inteligentes separan sus pensamientos de los hechos con el fin de escapar del ciclo de negatividad y avanzar hacia una nueva perspectiva positiva.
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18. No permites que nadie limite tu alegría
Cuando tu sentido del placer y la satisfacción se deriva de las opiniones de otras personas, ya no eres el dueñ@ de tu propia felicidad. Cuando las personas emocionalmente inteligentes se sienten bien acerca de algo que han hecho no van a dejar que las opiniones de nadie o comentarios sarcásticos les alejen.
Es imposible eliminar las opiniones de los demás, pero es muy posible hacer que no te afecten. Tu autoestima y tu autoconcepto -la opinión que tienes de ti mism@- debe nacer de interior, que para eso es TU opinión.
Yo como siempre, te espero en la próxima. Un gran saludo y un abrazo, Andrea.
Seguir leyendo:
Esta bien
¿y la empatía?
En el segundo punto Antonio 🙂 Te dejo el artículo relacionado https://www.euroresidentes.com/estilo-de-vida/superacion-personal/como-la-empatia-te-hace-ser-mejor
Andrea debes repasar el concepto de inteligencia emocional.
1. Las emociones se expresan de muchas formas, con gestos, hechos, etc. No necesitan de vocabulario y de grupos «slectos». Un madre sencilla sin estudios puede terner infinita inteligencia emocional que otra ejecutiva de primer nivel de NY.
2- Precisamente la Inteligencia emocional evita ser juez de nadie. Aunque los explicas un poco, «ser juez» no es el término más afortunado.
3. Leyendo en general tus «indicadores» paracen más los de una persona egocéntrica que los de una persona con inteligencia emocional. Una persona con intligencia emocional es aquella que es equlibrada, estable y resuelve con una gran capacidad y empatia sus relaciones personales, de tal forma que le fortalecen y nunca le debilitan. Por tanto sabe manejar con éxito sus relaciones personales, familiares, laborales, etc….
Hola Antonio, gracias por la aportación. Siento que se malentienda la intención. Estoy totalmente de acuerdo contigo en que las emociones no sólo se expresan con palabras. Me refiero más bien en ese punto en que uno es capaz de poder poner un nombre a lo que siente. Un nombre específico, no sólo tristeza -por ejemplo- ya que quizá no es tristeza, sino más bien…angustia o apatía -por ejemplo-. SEr capaz uno mismo de poder descifrar qué emoción está sintiendo a cada momento, poder ponerle un nombre. En absoluto propongo la idea de que los grupos «selectos» son aquellos en los que hay personas con más formación, con «selecto» me refiero a un grupo pequeño, distinguido. Personas que, independientemente de su status u origen o cualquier criterio social, son capaces de poner nombre a lo que sienten. Porque eso de entender y gestionar nuestras emocionas quizá no es algo que todos hemos tenido la oportunidad de poder aprender como merecemos, y de ahí quizá el malentendido con la palabra «selecto».
Es cierto eso de que la palabra «juez» no es la más acertada. Juzgar es una palabra que no me gusta para nada y puede confundir totalmente el sentido de la frase. Gracias de nuevo y que pases un gran día.
Soy IE, Soy YO SOY.
ME ha gustado Serena eso de Soy YO SOY. 🙂 ¡Feliz día!