Promoción inmobiliaria y corrupción: deterioro de la imagen de España en el extranjero

El mapa de la corrupción ligado a la promoción inmobiliaria abarca toda España, incrementando su densidad en las zonas costeras.  La crisis actual está sacando a la luz los muy numerosos casos de corrupción cuya amplia difusión en medios de prensa de todo el mundo está haciendo un daño muy considerable a la imagen del sector inmobiliario español en el extranjero.  Hemos hecho una consulta a algunos corresponsales extranjeros que aunque nos han dado sus opiniones han preferido guardar su anonimato.

La corrupción en todos los medios extranjeros

Todos los medios desde The Guardian en el Reino Unido hasta recientemente The New York Times (ver artículo traducido) en Estados Unidos han publicados artículos muy duros sobre la situación de nuestro país. Hasta actores como Sean Connery se han visto envueltos en casos de corrupción ligados al sector inmobiliario, propiciando un mayor eco mediático. Lamentablemente estos temas van haciéndose bastante asiduos a la hora de hablar de nuestro país.

Una rápida consulta a algunos de los corresponsales de prensa extranjera en España viene a poner de manifiesto que su difusión exterior no va a remitir. Por ejemplo, la actualidad en la prensa nacional del caso Brugal en la Comunidad Valenciana, superpuesto a otros caso ya divulgado internacionalmente: el caso Gurtel. El caso Brugal y su estrecha relación con el sector inmobiliario está todavía pendiente de explotar por la prensa extranjera, que prepara amplios reportajes sobre este caso.

Las reacciones ante la corrupción

Algunos empresarios  reclaman al gobierno un esfuerzo por mejorar la imagen de España en exterior. Temen que la demanda extranjera de viviendas es muy difícil que vuelva a resurgir si persiste una imagen deteriorada del sector inmobiliario español en el exterior. En el ámbito de la justicia la preocupación es de otra índole: la necesidad de acometer medidas legislativas que permitan luchar de forma más eficaz la expansión de los delitos y la corrupción urbanística en España.

Internet y muy especialmente las redes sociales constituyen un medio muy activo a la hora de propagar la lacra de la corrupción entre la población. Esta concienciación ha saltado a la calle. En las pasadas elecciones autonómicas y locales del 22-M, el movimiento del 15-M llevó a los ciudadanos a plantear duras acusaciones y críticas a los dos grandes partidos, PP y PSOE, afectados por numerosos casos de corrupción que se reflejaban en una muy preocupante presencia de imputados en casos de corrupción en las listas electorales.

También llama la atención que las grandes centrales sindicales no sean más beligerantes ante el tema de la corrupción.

La inercia política ante la corrupción

Según los corresponsales extranjeros la inercia política de los dos grandes partidos sobre los temas de corrupción  quizás esté detrás del amplio deterioro que la imagen de los políticos españoles. Para ellos no es la prensa extranjera la culpable de la mala imagen exterior. Nos recuerdan que para los ciudadanos españoles, según las encuestas oficiales del CIS, los políticos constituyen uno de los principales problemas que tiene España hoy en día. Sin embargo, señalan que los más sorprendente de todo es que, a pesar de esta toma de conciencia, los imputados en delitos de corrupción acaban siendo elegidos por los ciudadanos con amplias mayorías, tal como ha sucedido en las recientes elecciones del 22-M.

Ante esta situación algunos corresponsales se preguntan si la corrupción se ha llegado a enquistar socialmente en España. Sospechan que su entidad quizás trasvase ampliamente el terreno de la política o de las grandes empresas inmobiliarias para pasar a pequeñas empresas, autónomos, trabajadores ilegales, desarrollo de la economía sumergida, etc. En este caso, según comentan, es más inexplicable la pasividad del gobierno español.

El mapa de la corrupción inmobiliaria en España

La distribución geográfica de la corrupción en España viene a demostrar el impacto del sector inmobiliario en el desarrollo de casos de corrupción. La costa, objeto de numerosas promociones y de recalificaciones de suelo es el principal feudo de numerosos casos de corrupción en España. Andalucía, la Comunidad Valenciana, Baleares, Murcia, Canarias y Cataluña destacan por el elevado número de casos que han salido a la luz.

Sin embargo, los corresponsales sospechan que el porcentaje de casos denunciados que salen a la luz en España es bastante pequeño sobre el total de delitos y corruptelas, presumiendo que la gran mayoría de estos permanecen ocultos. La complejidad de los temas urbanísticos, la complicidad entre promotores y políticos de muy diferente signo, provoca que sea difícil identificar un gran porcentaje de los casos de corrupción.

El tema es mucho más complejo si se considera que muchas cajas de ahorros (en sus consejos están destacados promotores y políticos de los dos grandes partidos) y las grandes empresas promotoras y constructoras han realizado inversiones en países de América Latina y se sospecha que una parte de sus fondos han ido a parar a una maraña de sociedades que acaban en paraísos fiscales sin control, ni acceso a información judicial.

En estas condiciones es difícil hablar de un mapa de la corrupción en España. Primero porque presumiblemente sólo sale un porcentaje pequeño a la luz y su identificación es aleatoria. Segundo, porque la corrupción inmobiliaria escapa a las fronteras fiscales en España, extendiéndose en el extranjero y en paraísos fiscales a recaudo del control del fisco y la justicia española.

Conclusiones

La conclusión es que, por la razones expuestas, España se enfrenta a un grave problema que puede acabar teniendo aun más graves consecuencias para la economía española, azotada ya por un paro cercano a los cinco millones de personas y cuya credibilidad es cuestionada periódicamente en los mercados exteriores a la hora de refinanciar su deuda. En definitiva, no es explicable la laxitud gubernamental ante un problema de tal magnitud….

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