Un hombre que la halaga, y un hombre que la adula (adular: alabar excesivamente a alguien, generalmente con fines interesados).
Un hombre que gasta dinero en ella, y un hombre que invierte en ella.
Un hombre que la ve como una propiedad, y un hombre que la ve como una prioridad.
Un hombre que la desea, y un hombre que la ama.
Un hombre que piensa que es un regalo para ella y un hombre que piensa que ella es un regalo para él.
Y después enseñar a nuestros hijos a ser esa clase de hombre.
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