Beber té negro puede ayudar a proteger contra la diabetes tipo 2.
Tras analizar los datos de 50 países, los investigadores de un estudio, publicado en la revista BMJ Open, encontraron que cuanto mayor era el consumo de té negro en estos países menor era la tasa de diabetes.
Los países que mayor consumo de té negro tenían eran Irlanda, Reino Unido y Turquía, y los de consumo más bajo Corea del Sur, Brasil y China.
El té negro está más fermentado que las otras variedades de té, y contiene una variedad de flavonoides, que se liberan durante el proceso de infusión, que se han relacionado con beneficios potenciales para la salud.
Aunque el estudio encontró una asociación matemática entre el consumo de té negro y las tasas de diabetes tipo 2, no demuestra causalidad.
Por lo que para reducir el riesgo de diabetes sigue siendo importante controlar el estilo de vida y la dieta.
Es recomendable limitar los alimentos que contienen azúcares refinados y harina blanca, añadir frutas, verduras, cereales integrales y lácteos bajos en grasa a la dieta, y hacer al menos 30 minutos de ejercicio aeróbico por lo menos tres veces a la semana.
Beresniak A, Duru G, Berger G y Bremond-Gignac D. BMJ Open (2012). Online.
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