Cómo decorar y organizar el cuarto de los niños

7 trucos para ordenar las habitaciones de los niños

Todo tiene su momento y este es el de cambiar la habitación de tus niños. Ha llegado el día de ordenar las habitaciones y las zonas de juego de los niños. La clave está en verlo todo desde su perspectiva y ponerse a su altura. Mirar el espacio, la zona de almacenamiento, los muebles y sus pertenencias desde esa posición ventajosa y adapta tus estrategias. Aquí tienes una serie de consejos para organizar las habitaciones de los niños:

1. Mirar desde la posición de los niños

La comodidad es un factor importante para conseguir que alguien ordene o recoja las cosas: colocar unas barras de armario bajas; poner los objetos que más se utilizan en los estantes y cajones más bajos. Colocar papeleras, cajas, cestas decorativas en las esquinas, en el suelo del armario y a los pies de la cama.

2. Ocultar cosas bajo la cama

Utilizar cubos de almacenaje rectangulares, planos y con ruedas, especialmente diseñados para almacenar cosas bajo la cama. Se pueden clasificar los cubos por tipos de juguete. Los niños pequeños pueden guardar sus materiales de pintura en uno de los cubos; los mayores pueden meter los libros y libretas del colegio. Y así podrán almacenar de una forma más fácil y sencilla.

3. Hacer del orden algo divertido

Ordenar una habitación puede ser una tarea pesada incluso para los adultos. Imaginar cómo se puede sentir el niño al pensar en recoger todos sus juguetes, su ropa y materiales escolares. Dejar que el niño se implique, permitiendo etiquetar de forma creativa y a su gusto sus propios cajones y cubos de almacenaje. También podemos hacer unas fotos al niño y pegar en los cubos y cajones. Otra opción es pegar en el frente del cajón una muestra de su contenido. Si vamos a guardar en un cajón pequeños soldados de juguete podemos pegar una bolsita plástica en el frente e introducir en ella un soldadito de juguete como ejemplo del contenido. Se pueden comprar protectores plásticos de hojas, cortar al tamaño deseado y utilizar cinta adhesiva para pegar etiquetas plastificadas a los cubos de almacenaje. Poner una cesta para la ropa sucia bajo un aro de baloncesto para niños, será más divertido cuando tenga que echar la ropa sucia.

4. Poner cajones poco profundos

Cuanta más profundidad tenga el cajón, más cosas guardarán en ellos los niños. Alguno carritos de almacenaje con ruedas traen cinco o seis cajones finos. Se puede meter el carrito en el armario en caso necesario, o alinear varios contra una pared. Llenar los cajones más profundos con organizadores más pequeños, como pequeñas bandejas, latas, cajas, etc. No utilizar tapas para estos mini organizadores; a los niños les da más trabajo recordar lo que hay en cada recipiente y a menudo se olvidan de volver a poner la tapa de cada uno de ellos. Utilizar divisores de cartón improvisados para separar las cosas dentro de los cajones.

5. Establecer un código de colores

Se pueden comprar cubos de almacenaje de distintos colores para distintos tipos de juguetes, clasificar la ropa en perchas de distintos colores o utilizar un color diferente para cada niño.

6. Colgar sus dibujos

Su colección de dibujos hechos por él puede ser tan importante como para nosotros nuestra colección de cuadros comprados. Podemos comprar unos marcos baratos y colgar sus dibujos agrupados en una pared a modo de composición artística. Esto añadirá un toque decorativo y personal a la habitación. También podemos poner un tablero de corcho para que los niños puedan colgar sus medallas y premios de competiciones deportivas o escolares. Se puede poner otro corcho para sus fotos. O colgar un organizador de tela rectangular hecho por nosotros con bolsillos en posición vertical detrás de la puerta para que pueda poner fotos, tarjetas de cumpleaños, postales.

7. Fijar unas reglas de juego

Antes de jugar a otro juego de mesa, recoger el anterior. O que antes de cada época de regalos como cumpleaños o navidades, tenga que elegir un juguete para donar a una organización de caridad y hacer feliz así a un niño que no tenga su suerte. Otra posible norma es que no pueda tener en su habitación nada que no tenga un sitio, de ese modo, si un cajón está lleno y quiere almacenar algo nuevo, deberá tirar algo viejo para hacerle sitio.