Confía en el otro
Si no tienes confianza en tu pareja, no sigas leyendo. La confianza se crea poco a poco, con actos, con hechos, con compromiso… Tu pareja debe creer en ti, igual que tu en él.
Cumple tus promesas
Sin esto, el punto anterior se viene abajo. Si quieres que alguien confíe en ti debes cumplir las promesas que haces. No rompas la confianza.
Escuchar
A veces, lo que quieres es a alguien que te escuche, ¿no? Así que simplemente sentarte a escuchar lo que el otro quiere contarte y que esa persona sienta comprensión y empatía por tu parte, puede ser suficiente.
Reir juntos
A medida que las relaciones progresan, las cosas tienden a ser menos idílicas. El trabajo, los estudios, la familia, el dinero… existen muchísimos factores por los que tu pareja es tu desahogo y no tu alegría. Asegúrate de hacer cosas que os hagan felices, cosas con las que podáis reirás juntos.
Paciencia
Por lo general, las relaciones suelen ser 50% amor, 50% paciencia. Recuerda que hay días en los que tienes que tener mucha paciencia, igual que otro día la debe tener el otro. Esto es así.
Abrazaros
Abrazar a tu pareja es importante ya que crea una sensación de seguridad y amor. Tómate un tiempo para ser un poco «pasteleso» y pegajoso con tu pareja, os acercará más.
Mantén viva la pasión
Planear una cita, algo diferente que os saque de la rutina, dónde podáis compartir un momento de intimidad y pasión, algo primordial para el buen funcionamiento de una relación.
Planea unas vacaciones
Tu pareja y tu necesitáis un tiempo para relajaros y disfrutar realmente el uno del otro. Irte a otro lugar, te llevará lejos de tu rutina diaria y te hará recordar por qué te enamoraste de él o ella.
Dale su espacio
A absolutamente nadie le gusta sentirse ahogado o controlado en una relación. Dándole el tiempo y el espacio que necesita el otro, tu también obtendrás lo mismo.
Acepta a tu pareja tal y cómo es
No puedes pretender cambiar a alguien o creer que con el tiempo cambiará a tu antojo. Nadie es perfecto, así que partiendo de esta base, debes quererle y aceptarle cómo sea.
Dile que le quieres
Nunca debes olvidarte de recordárselo. Es algo muy sencillo y totalmente necesario.
Pide perdón
Porque no siempre somos perfectos, ni siempre tenemos nuestro mejor día, así que cuando tengas que hacerlo, hazlo: Pide perdón.
Compromiso
No hay dos personas iguales en el mundo, así que es importante llegar a un acuerdo sobre vuestras diferencias y saber qué nivel de compromiso tenéis cada uno en la relación.
Hablar del futuro
Si bien es cierto que esto no debéis hacerlo todos los días, no está demás saber a qué quiere dedicarse tu pareja, si quiere formar una familia en un futuro o dónde le gustaría vivir. Estos aspectos son los que hacen que las relaciones no lleguen a ninguna parte, así que es bueno saber a qué atenerte.
Hacer regalos
Porque a nadie le amarga un dulce y porque cuando alguien te regala algo, te sientes más querido. Lo siento, pero es lo que hay.
Dile cosas bonitas
¡Qué guapo estás hoy! o ¡Qué bien te queda ese color de pelo! o ¡Qué sexy! cosas que siempre gusta escuchar de la persona que quieres.
Respeto
Trata a tu pareja de la manera que te gustaría ser tratado.
Acepta los cambios
Las cosas cambian, las personas cambian…¿por qué no iban a cambiar las relaciones? El secreto es aceptar y adaptarse al cambio. No todos los cambios son malos, ya que en el camino puedes encontrar experiencia nuevas muy gratificantes.
Sé optimista
No hay nada más horrible, que estar intentando «sacar del pozo» a la otra persona continuamente. Trata de ver el lado bueno de las cosas, no lo compliques. Siempre hay luz detrás del túnel
Manténte en buen estado
Nunca debes pensar «bueno, como ya le tengo, no tengo que esforzarme» No, NUNCA. Haz ejercicio, preocupate en vestir bien, maquillarte, arreglar tu pelo…. cosas que mantengan la llama de la pasión y el amor encendida.
La teoría e suma cosa, pero la práctica…..