Lavar el pollo crudo con agua corriente, en el fregadero de la cocina, puede acabar teniendo consecuencias importantes para la salud.
¿Sabes que incluso una sola gota del agua que se ha utilizado para lavar el pollo crudo contiene suficientes bacterias para infectar a una persona?
¿Qué pasa cuando lavamos el pollo antes de cocinarlo?
Lavar el pollo crudo puede conducir a una intoxicación alimentaria potencialmente peligrosa causada por la bacteria Campylobacter.
Al lavar el pollo crudo, las bacterias que están presentes en gran parte de las aves de corral se extenderán a las manos, ropa, utensilios de cocina y a las superficies de trabajo a través de las pequeñas gotas agua que puedan salpicar.
¡Una infección por lavar el pollo!
La bacteria Campylobacter causa una enfermedad infecciosa conocida como campilobacteriosis que puede producir diarrea, náuseas, vómitos, dolor abdominal, cólicos y fiebre.
En las personas con sistemas inmunológicos débiles, las bacterias puede pasar a la sangre y causar una infección que puede llegar a ser mortal.
La bacteria Campylobacter también se ha asociado con problemas importantes de salud como el síndrome del intestino irritable, la artritis reactiva y el síndrome de Guillain-Barré, un trastorno grave del sistema nervioso.
Las personas pueden infectarse no sólo de lavar el pollo crudo, sino también por el uso de tablas de cortar o utensilios sin lavar que se hayan utilizado para cortar la carne cruda y que se vuelva a utilizar para preparar otros alimentos crudos o ligeramente cocidos.
Aquí tenéis un vídeo en el que se explica cómo se pueden extender las bacterias al lavar el pollo:
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Entonces no lo lavo?
La investigación recomienda no lavarlo y cocinarlo directamente. Las altas temperaturas que alcanza en la cocción destruirá cualquier germen que pueda contener. Un saludo!!