Cuando hablamos de Facundo Cabral se nos vienen a la cabeza sus monólogos y canciones que han hecho historia por su contenido filosófico y realista, así como espiritual y sincero. Facundo Cabral (1937-2011), este cantautor, filósofo, escritor y compositor nos erizó la piel tanto con el testimonio de su amarga niñez, como con la determinación con que luchó y salió adelante superando grandes obstáculos, así como por la dura crítica social que caracteriza sus canciones, sin olvidar por supuesto el ánimo y motivación que transmitía en ellas.
Bienaventurado el que sabe que compartir un dolor es dividirlo y compartir una alegría es multiplicarla.
Estábamos un día en Nueva York, y a la salida del teatro Lincoln Center se me acercó un periodista y me espetó: ‘Señor Cabral, yo estoy de acuerdo en todo lo que usted ha dicho esta noche, excepto en que Dios es siempre justo. Si Dios fuera siempre justo, usted debería tener tanta difusión, tanto éxito como Julio Iglesias.’ A lo que yo le respondí: ‘Claro que Dios es siempre justo. Julio Iglesias tiene más difusión, más éxito que yo puesto que necesita del dinero mucho más que yo para vivir. Yo, necesito más libertad que Julio para vivir, por eso Dios me hizo más libre.
Si los malos supieran lo buen negocio que es ser buenos, serían buenos, aunque sólo fuera por negocio.
La sociedad humana esta tan mal por las fechorías de los malos, como por el silencio cómplice de los buenos.
Fui analfabeto hasta los 14 años, por eso cuando me dicen ‘no puedo’, yo les digo «no jodas».
Solamente lo barato se compra con el dinero.
Lo maravilloso de la tercera edad que estoy atravesando es haber vivido intensamente la primera y la segunda. Y yo, por suerte, fui joven e irresponsable durante muchos años.
Le tengo mucho miedo a los pendejos, porque son muchos y pueden elegir un presidente.
Hay tantas cosas para gozar y nuestro paso por la tierra es tan corto, que sufrir es una pérdida de tiempo.
En la tranquilidad hay salud, como plenitud, dentro de uno. Perdónate, acéptate, reconócete y ámate. Recuerda que tienes que vivir contigo mismo por la eternidad.
Puedo decir descaradamente que soy un tipo libre y feliz.
Doy la cara al enemigo, la espalda a un buen comentario porque el que acepta un halago empieza a ser dominado.
Ama hasta convertirte en lo amado, es más, hasta convertirte en el amor.
Todos tenemos una conciencia, pero pocos la escuchamos.
Lo tendría todo, si no me faltara el miedo.
Me gusta salir a mirar aparadores para darme cuenta de las cosas que no necesito.
El conquistador por cuidar su conquista, se convierte en esclavo de lo que conquistó. Es decir, que jodiendo se jodió.
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Pobrecito mi patrón, el piensa que el pobre soy yo.
Les tengo miedo a los boludos,porque son muchos y hasta eligen Presidente.
"soy el orgullo de mi abuela,que fue la vergüenza de la familia"