Ana María Matute, Esta escritora que ha sido un icono en el mundo de la literatura nos ha dejado, pero su presencia va a persistir mientras sus libros siga siendo leídos. Como homenaje a esta gran mujer de letras estas citas célebres de Ana María Matute.
15 citas célebres de la inolvidable Ana María Matute:
- Siempre he creído, y sigo creyendo, que la imaginación y la fantasía son muy importantes, puesto que forman parte indisoluble de la realidad de nuestra vida.
- El sentido de la vida cambia completamente cuando tienes un hijo. El mundo se vuelve mejor y da más miedo también, porque tiene miedo de que aquello se rompa.
- Yo soy una desarraigada nata. Yo voy conmigo a todas partes. Mi mundo soy yo, mis sueños. Cuando voy a un país o a cualquier sitio, yo lo transformo en lo que a mí me interesa, y dejo lo que no me interesa: no lo veo.
- Me gustaría ser recordada como una mujer que amó mucho la vida.
- La cabeza me funciona: la tengo tan mal como siempre.
- Me parecería una auténtica falta de cortesía que dios no existiera.
- Yo no escribo para ganar dinero, pero si escribo y tengo que comer, es mejor si me pagan.
- Nunca me he aburrido. En esta vida lo he podido pasar muy mal… Y también lo he pasado muy bien, ¡Uf! Pero aburrirme, jamás.
- La ilusión por la vida nos hace soportar la proximidad de la muerte.
- El mundo hay que fabricárselo uno mismo, hay que crear peldaños que te suban, que te saquen del pozo. Hay que inventar la vida, porque acaba siendo verdad.
- No debemos olvidar que lo que el espejo nos ofrece no es otra cosa que la imagen más fiel y al mismo tiempo más extraña de nuestra propia realidad.
- Lo «políticamente correcto» casi nunca es literario.
- Nosotros somos criaturas de carne débil y cien veces más débiles de espíritu…Mezquinos, vanidosos, egoístas y crueles. Pero así somos, lucharemos, por tanto, con las armas que nos fueron dadas y dejaremos atrás lo que aún no estamos capacitados para entender ni utilizar debidamente.
- Escribir es también una forma de protesta. Casi todos los escritores comparten el malestar con el mundo.
- Si no hubiese podido participar del mundo de los cuentos y si no hubiese podido inventarme mis propios mundos, me habría muerto.