El presidente del gobierno Mariano Rajoy ha hecho un importante anuncio en Asturias: el desarrollo de una ley que regule la actividad de los emprendedores y que simplificará muchas normativas existentes. En esto último se puedan hacer progresos enormes eliminando una serie de normas carentes de sentido, regulaciones que representan una maraña burocrática ineficaz y absurda, entorpecedora, en vez de incentivadora para impulsar ideas y proyectos de jóvenes emprendedores que empiezan a dudar de su empeño ante un entorno administrativo burocrático, obsoleto y que se riñe con la racionalidad y eficiencia digital de nuestro tiempo.
La cultura digital y la cultura burocrática regulacionista están profundamente reñidas. Un país que va para seis millones de parados no puede permitirse el lujo de poner trabas a los que quieren crear empresas. Las pymes crearon el 85% del empleo en la UE entre 2002 y 2010. Este dato bastante conocido debería haber bastado para que el Gobierno Zapatero la convirtiera hace meses en una prioridad absoluta.
En muchos países avanzados se crean empresas on line en 48 horas. A quien quiere crear una empresa se le identifica y se le pone una alfombra roja: TODO FACILIDADES. Y probablemente estas administraciones son mucho más eficientes que la nuestra a la hora de velar por los intereses públicos que pueden verse afectados por la actividad empresarial (medio ambiente, economía sumergida, evasión de impuestos, salud e higiene, etc). Porque lo que incrementará estas garantías serán buenos servicios de inspección, no una ridícula maraña de burocracia administrativa “preventiva”.Insisto, seis millones de parados exigen cambiar no sólo los trámites administrativos para crear una empresa sino la propia concepción social del empresario, su prestigio y función social central en una economía de mercado globalizada. Hay una trasnochada mezcla de complejo bolchevique y una idea de que los emprendedores actuales todavía son la quinta esencia de explotadores del trabajo narrados con crudeza dikensiana.
Las universidades deberían ser un ámbito extraordinariamente fertil en la creación de empresas de base tecnológica por parte del profesorado y de cientos de graduados con fuerte vocación para emprender. Logramos justo casi lo contrario. ¿se lo puede permitir un país con seis millones de parados?
Cómo van a ser las universidades incubadoras de EBTs o spin-offs si sólo tienen recursos para cubrir el capítulo 1 y llegar a fin de cuatrimestre. Tenemos una generación, y casi dos, de jóvenes sobrecualificados que nadie quiere contratar (salvo en B) y que nunca han tenido contacto con el mundo laboral, por lo que no se atreven (lógico) a emprender.
Quizás por esa misma razón las universidades y los universitarios deberíamos ser más activos en la creación de empresas EBTs. La generación de estas quizás no está tanto correlacionada con el Capítulo 1 o los fondos de las universidades, sino con la capacidad de generar ideas competitivas y con la necesidad de que asumamos en el entorno académico una cultura de empresa, que en nuestros días es más bien anti-empresa.
A los jóvenes que sobrecualificamos no les damos herramientas ni la formación necesaria para poner en marcha ideas empresariales basadas en el conocimiento, más bien les formamos pensando en que en efuturo serán trabajadores que preparen oposiciones o busquen trabajo…
sin créditos????? no, señores…..si empresas formadas han cerrado por falta de crédito,¿cómo van a abrir otras nuevas? Si la gente gana menos, gastan menos y los clientes desaparecen. Me mantengo como empresario porque ahora es empresa familiar.
En mi modesta opinión no se trata de abrir empresas en sectores tradicionales donde la demanda está más que satisfecha (nacional e internacionalmente. Los nuevos emprendedores deben apoyar el crecimiento de la economía en nuevas actividades que sumen y no resten al tejido económico existente. Quizás hay que hacerse un hueco en la "nueva economía": TIC (miles de informáticos buscando empleo en vez de crear nuevas empresas que generen más empleos), biotecnología, nanotecnología… Y quizás lo más importante es crear pequeñas empresas, sin muchas necesidades de financiación. De lo contrario ¿cuál es la alternativa? ¿bajar los salarios y empobrecernos hasta ser competitivos frente a los BRIC?
(sigue) tenemos que pensar en crear pequeñas empresas exportadoras, competitivas en los mercados exteriores en bienes que no compitan con productos de China, India, Brasil…. Internet es una oportunidad para crear muchas empresas. Pero mientras que en Hong-Kong se crea una empresa en 48 horas en España se tardan meses. Mientras que aquí le damos un trato fiscal desventajoso y una leyes restrictivas en Irlanda y otros países dan facilidades…. Si hubiéramos empezadoa trabajar en esto hace 10 años, ahora tendríamos un alaternativa real al hundimiento del ladrillo…
Cómo van a ser las universidades incubadoras de EBTs o spin-offs si sólo tienen recursos para cubrir el capítulo 1 y llegar a fin de cuatrimestre. Tenemos una generación, y casi dos, de jóvenes sobrecualificados que nadie quiere contratar (salvo en B) y que nunca han tenido contacto con el mundo laboral, por lo que no se atreven (lógico) a emprender.
Quizás por esa misma razón las universidades y los universitarios deberíamos ser más activos en la creación de empresas EBTs. La generación de estas quizás no está tanto correlacionada con el Capítulo 1 o los fondos de las universidades, sino con la capacidad de generar ideas competitivas y con la necesidad de que asumamos en el entorno académico una cultura de empresa, que en nuestros días es más bien anti-empresa.
A los jóvenes que sobrecualificamos no les damos herramientas ni la formación necesaria para poner en marcha ideas empresariales basadas en el conocimiento, más bien les formamos pensando en que en efuturo serán trabajadores que preparen oposiciones o busquen trabajo…
sin créditos????? no, señores…..si empresas formadas han cerrado por falta de crédito,¿cómo van a abrir otras nuevas? Si la gente gana menos, gastan menos y los clientes desaparecen. Me mantengo como empresario porque ahora es empresa familiar.
En mi modesta opinión no se trata de abrir empresas en sectores tradicionales donde la demanda está más que satisfecha (nacional e internacionalmente. Los nuevos emprendedores deben apoyar el crecimiento de la economía en nuevas actividades que sumen y no resten al tejido económico existente. Quizás hay que hacerse un hueco en la "nueva economía": TIC (miles de informáticos buscando empleo en vez de crear nuevas empresas que generen más empleos), biotecnología, nanotecnología… Y quizás lo más importante es crear pequeñas empresas, sin muchas necesidades de financiación. De lo contrario ¿cuál es la alternativa? ¿bajar los salarios y empobrecernos hasta ser competitivos frente a los BRIC?
(sigue) tenemos que pensar en crear pequeñas empresas exportadoras, competitivas en los mercados exteriores en bienes que no compitan con productos de China, India, Brasil…. Internet es una oportunidad para crear muchas empresas. Pero mientras que en Hong-Kong se crea una empresa en 48 horas en España se tardan meses. Mientras que aquí le damos un trato fiscal desventajoso y una leyes restrictivas en Irlanda y otros países dan facilidades…. Si hubiéramos empezadoa trabajar en esto hace 10 años, ahora tendríamos un alaternativa real al hundimiento del ladrillo…