Según un estudio los bebés concebidos en ciertas épocas del año son más propensos a nacer antes de tiempo.
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La duración de la gestación y el peso al nacer suelen ser indicadores de la salud del bebé al nacer, y también se han asociado con la salud de los niños al crecer.
Los autores de un artículo, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, observaron que el tiempo de gestación era más corto en los niños concebidos durante la primera mitad del año, especialmente en mayo.
En concreto, los bebés concebidos en mayo tuvieron un 13% más riesgo de prematuridad que los bebés concebidos en otros meses del año. Además, los bebés concebidos durante el verano tenían un peso promedio más alto.
Para realizar el estudio se comparó la salud de hermanos concebidos por la misma madre en diferentes épocas del año.
En total se estudiaron más de 1,4 millones de nacimientos de los que se tuvo en cuenta el mes de concepción, en lugar del mes de nacimiento.
Los resultados mostraron que el tiempo de gestación medio disminuyó de manera relativamente constante entre los meses de enero y mayo, siendo en mayo casi una semana menor que en los niños concebidos en enero.
A partir de junio, el tiempo promedio de gestación volvió a los niveles de enero, y permaneció igual durante el resto del año.
Dado que investigaciones previas habían relacionado las infecciones de gripe con los nacimientos prematuros, los autores comprobaron que las madres que concibieron en los primeros cinco meses del año, especialmente en mayo, fueron más propensas a sufrir los síntomas de la gripe durante el mes que dieron a luz.
La fecha probable de parto en el caso de los bebés concebidos en mayo era a mediados de febrero, pero los resultados mostraron que en estos casos existían gestaciones más cortas, con partos que ocurrían a finales de enero y principios de febrero, en pleno apogeo de la temporada de gripe.
El peso al nacer está relacionado con la duración de la gestación, sin embargo también se observó que los niños concebidos en los meses de verano tendían a pesar aproximadamente entre 8 y 9 gramos más que otros bebés. Esto corresponde a un pico en la ganancia media de peso de la mujer embarazada durante el verano.
Currie J y Schwandt H. Proceedings of the National Academy os Sciences (2013). Más información.
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