El gobierno ha establecido un plan de desescalada en España que se contempla en cuatro fases hacia la «nueva normalidad», se espera que concluya a finales de junio, aunque dependerá de cada provincia.
Cada una de ellas tendrán una duración mínima de dos semanas. Consta de una primera Fase 0, que abandonó toda España a la vez y de las Fases 1, 2 y 3, que lo determinará el Ejecutivo basándose en unos marcadores, como es la situación de transmisión del virus o la capacidad sanitaria de cada territorio para hacer frente a un rebrote.
El Gobierno sostiene que la previsión de las fases de la desescalada es orientativa. Se mantiene como recomendación general el uso de mascarillas y el distanciamiento social.