Consejos y trucos para conservar galletas frescas y crujientes durante más tiempo.
Conservar las galletas y evitar que se pongan blandas suele ser un reto, una vez abres el paquete es muy frecuente que las galletas se pongan blandas y las acabes tirando porque nadie se las quiere comer, con la consiguiente pérdida de dinero que supone tirar comida.
Donde y cómo guardar las galletas
La mejor forma de almacenar galletas una vez abiertas es guardarlas en recipientes herméticos, secos y limpios, y no ponerlos cerca de fuentes de calor ni de lugares húmedos que los puedan estropear. Tampoco es recomendable mezclar diferentes tipos de galletas porque se pueden mezclar los sabores.
Características de la caja para galletas:
En principio cualquier recipiente con cierre hermético puede servir, pero asegúrate que el cierre funcione o que no haya algunas blandas antes de guardarlas (parece una tontería pero me ha pasado). Las cajas también pueden ser de metal o de cristal.
Trucos:
Para que la humedad no ablande o estropee las galletas puedes poner, un trocito de pan o algunas palomitas en el fondo. También puedes poner papel absorvente en el fondo e ir cambiando el papel cada cierto tiempo.
Cómo recuperar las galletas blandas
Con este truco podrás hacer que las galletas estén crujientes de nuevo y listas para consumir. Pon las galletas en un plato con papel de cocina absorbente (o una servilleta de papel) debajo y encima de las galletas y ponlas en el microondas durante 1 minuto. Deja que se enfríen y listo ya tienes galletas crujiente de nuevo. Este truco también sirve para recupera los donuts, pero en este caso con unos 10 segundos tienes sufciente.
Si las galletas son caseras:
Las galletas caseras se recomienda consumirla antes de dos semanas porque pasado ese tiempo su sabor y su textura puede cambiar, aunque bien conservadas pueden durar hasta 2 meses, siempre que las conserves de forma adecuada.
Algunas cosas importantes que tienes que tener en cuenta y un par de trucos para guardar las galletas caseras
- Deja enfriar completamente las galletas antes de guardarlas
- Si te gustan las galletas recién horneadas puedes congelar la masa y descongelar y hornear cuando te apetezcan.
- También puedes preparar las galletas, darles forma y ponerlas en la bandeja, las congelas y luego las puedes guardar así en porciones individuales y envueltas en papel de film o una bolsa especial para el congelador. Estas las puedes hornear congeladas, añade un par de minutos más al horneado y listo.
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