Un equipo internacional de investigación ha transformado, con éxito, grafeno (láminas de carbono con tan solo una capa de átomos de grosor) en su equivalente hidrogenado: el grafano. Los científicos, del Reino Unido, Rusia y los Países Bajos, señalaron que las propiedades electrónicas aislantes del grafano complementan la conductividad del grafeno, potenciando las perspectivas de la nanoelectrónica basada en el grafeno y las tecnologías de combustible hidrógeno.
Este trabajo es el primero en mostrar que se puede utilizar un enfoque químico para confeccionar a medida las propiedades de un nanomaterial como el grafeno, con el fin de adaptarlo a una aplicación concreta, señala Andre Geim, parte del equipo de la Universidad de Manchester. El equipo utilizó un flujo de átomos de hidrógeno para convertir grafeno en grafano de forma reversible.
Fuente: RSC