UN NUEVO AMIGO

Hoy me han regalado un tesoro… tengo un nuevo amigo.
Rafael, que así se llama mi nuevo amigo, ha pasado directamente la prueba de la amistad sin necesidad de conocernos y, a sus 96 años, ha irrumpido en mi vida pidiendo simplemente permiso para compartir mi compañía.
En su comentario a mi carta sobre Semana Santa, sigue el consejo del biznieto mayor, se mete en el ordenador y, sudando el sufrimiento que padecemos los viejos en la lucha con esta endiablada máquina, va y me regala sus comentarios. Y, además, contra la voluntad del chaval, que le aconseja el anonimato, me da su nombre como prueba de amistad..

La amistad es un valor indiscutible pero escaso, muy escaso.
Uno se pasa la vida conociendo gente, creyendo que algunos de esos conocidos van a ser amigos y al final nos damos cuenta de que no todos merecen esa credencial. El cedazo del tiempo y los acontecimientos, dejan en el fondo del garbillo pocas pepitas del oro de la amistad. Crecen las “amistades” pero no los amigos.
La fidelidad, la sintonía de ideas, la disposición incondicional, la aceptación de mutuos defectos, la sinceridad sin tapujos, la similitud en gustos y preferencias, el respeto a la diversidad, son ingredientes básicos para compartir el plato de la amistad necesariamente aderezado con lo más escaso: la lealtad..
En una de mis noches con paréntesis sin sueño, escuché en una emisora, que una señora adinerada había puesto en marcha un plan para poner a prueba a quienes, suponía, amigos de siempre.

La estrategia consistía en simular apuros económicos para pedir a los supuestos amigos, todos bien situados, 3.000 Euros. Todos respondieron con largueza menos una amiga de la que se lamentaba la comunicante y a la que procedería a borrar de su lista para siempre..
Valorar la amistad por un préstamo es ignorar qué debemos esperar y pedir al amigo. Es triste que el hombre juzgue al prójimo por lo que tiene y no por lo que es; porque ¿acaso conocía la bromista las circunstancias reales (no aparentes) de la evasiva?. Respetar las decisiones del amigo es condición indispensable, aunque nos parezcan inadecuadas en el sofoco de una apresurada decepción.
Es curioso que el número de los que en su día pasaron de conocidos a amigos vaya descendiendo inadvertidamente, casi de puntillas, hasta el punto de que un día te das cuenta de que amigos, lo que se dice amigos, te quedan muy pocos; ¿ qué pasó?: simplemente que unos cumplieron su tiempo y desaparecieron y otros, la mayoría, pasaron a ser simples “amistades” pero no amigos. ¿Lejanía, tiempo?. Para mí que tienen mucho que ver las divergencias de perspectivas. El foco de las ideas cambia a medida que el tiempo transforma el escenario. Todos evolucionamos durante el paso por la vida: yo, también.
Sea cual fuere la causa, el resultado es que el oro de la amistad se ha oxidado.

Mi querido Rafael: intuyo que tenemos mucho en común y que va a ser un bálsamo nuestra amistad porque estoy seguro de que vamos a compartir felices nuestras experiencias.
Nunca me ha gustado que a los mayores se nos agrupe como a un colectivo más, con parámetros de edad. Entiendo que, a efectos administrativos, nos metan en una clasificación burocrática.
Pero no me encaja que los humanos con los que convivimos, con la mejor intención, nos discriminen y nos guarden en el armario de los trastos inútiles, como fuera de juego Y es que no se dan cuenta de que somos los mismos cada vez que cumplimos años. Si conservamos el don de la salud, las ganas de vivir, de conocer, de disfrutar los avances tecnológicos para seguir enriqueciendo nuestra mente; si nos gusta, en una palabra, vivir nuestro tiempo ¿ por
qué se nos considera fuera de su juego? Nuestra juventud mental nos da la ventaja de transmitir lo que sólo el tiempo produce: nuestra experiencia. Esa es nuestra ventaja, amigo Rafael; gracias a la modernidad, que también es nuestra, y, utilizando esta herramienta, este invento, que a los dos nos fascina, seguiremos dando fruto como lo dan las encinas centenarias.
Nuestro ordenador será nuestra mesa camilla y a ella invitamos a cuantos quieran participar.
¿ Que es difícil y mortificante? Lo sé y lo sufro. Pero supongo que para los dos, -y muchos más-, hacer clic con nuestras manos rugosas y que, a pesar de nuestra torpeza, se abra una ventana que nos permite ver el mundo, la ciencia, el arte o la historia es sencillamente un milagro; y si, además, nos atrevemos a escribir, estaremos demostrando al mundo que estamos vivos y que aun contamos..
No necesitamos viajar ni incordiar con nuestras limitaciones. El café esta siempre servido y la mesa camilla esperando.

Con mi promesa de ser amigos le envío mi más cordial abrazo: PEPE ORTS

Postdata: Digale a su biznieto que no se canse de escucharle. Nadie le dará a beber un agua más
limpia y más colmada de sabiduría…
¡Ah! y, de paso, hágale saber que le envidio por disfrutar de su compañía.

10 Respuestas

  1. rafael 17 años ago
  2. Nati 17 años ago
  3. lola 17 años ago
  4. lola 17 años ago
  5. Euroresidentes 17 años ago
  6. Susana Marin 17 años ago
  7. Anónimo 15 años ago

Añadir Comentario