Matricula gratis para emprendedores |
Juan Vicente Sánchez Andrés durante su etapa como Director del Programa Emprendeduría y Creación de Empresas en la Escuela de Organización Industrial (EOI) me indicaba que lo del ADN emprendedor no es un mito. Juanvi, catedrático de Neurofisiología, estaba convencido hasta tal punto, que me proponía en clave de humor recoger discretamente cabellos de determinados “iconos” del emprendimiento en nuestro país.
Unimooc AEmprende y su matricula masiva de potenciales emprendedores (50.000 emprendedores matriculados de más de 100 países) sería un buen campo de pruebas del Big Data para identificar actitudes y aptitudes relacionadas con el emprendimiento. Al menos de aquellos que les mueve un interés o curiosidad hacia el emprendimiento. Esto en un país con seis millones de parados debería considerarse un tesoro.
También lo son los protagonistas de los casos de éxito en Internet en España y otros países. A mis alumnos de Economía, siempre les suelo repetir que hacer negocios en Internet es fascinante por la mezcla de lo fácil y extraordinariamente complejo que es. Y queda patente cuando analizamos en clase los perfiles de protagonistas que son referencia mundial (Larry Page, Sergey Brin, Steve Jobs, Bill Gates, Mark Zuckerber, Jeff Bezos, Jack Dorsey..).
Las cuatro claves del emprendimiento en Internet
Esto mismo se destaca en el vídeo de Bernardo Hernández en uniMOOC AEmprende. Bernardo (Tuenti, Idealista, Google…) destaca lo que considera los” pilares del emprendimiento tecnológico” y centra su atención en sólo cuatro cualidades:
Puede llamar la atención que sólo se haya centrado en estas cuatro facetas del emprendimiento.
Se podrían encontrar centenares de características de los emprendedores o rasgos que definen el espíritu de los empresarios en general. Hace unas semanas tuve un think-tank con algunos miembros del grupo de Máximo Potencial (José María Vicedo, Manuel Pomares, Miguel Angel Guilló, José Manuel Sánchez, Alvaro García y Modesto Crespo). En su libro Ahora sí. 101 dosis de inspiración y superación personal, a la hora de elegir diez claves hablan de aspectos tales como: Compromiso, Fe en el éxito, Capacidad para aprovechar las oportunidades, Actitud proactiva, Liderazgo, Conectar los puntos necesarios, Convencimiento de que es posible, Habilidades para la generación de equipos, Visualización, Pasión…, todos ellos sin duda muy relevantes.
La aportación selectiva de Bernardo Hernández a mi juicio hay que verla en el marco de los negocios de Internet donde los cuatro pilares que destaca adquieren la mayor relevancia, tal como se encarga de explicar muy bien en el vídeo y las lecciones del curso. Si pensamos que Internet lleva consigo una competencia global, con débiles barreras de entrada, impresionantes ritmos de innovación y cambios continuos muy relevantes, protagonismo absoluto del usuario… comprendemos mucho mejor las recomendaciones de Bernardo.
Mi amigo Juanvi tiene otra tarea importante identificar no sólo el gen emprendedor en general sino el de un espécimen nuevo revolucionario y único: el gen del emprendedor tecnológico. Ambición, perseverancia, capacidad para superar miedos… Menos mal que nuestra amiga Raquel Pomares nos desvela que emprender es bueno para la salud.
Por alusiones….es que hay pocas razones para dudar sobre la idea de que los emprendedores tienen genes (ADN) especiales. En este momento hay evidencias científicas pero aparte es que es lo esperable. El carácter emprendedor comprende un conjunto de rasgos y lo normal es que haya personas que los tengan mas desarrollados que otros. Forma parte de la biodiversidad humana. Lo que sucede es que la gente acepta como normal la diversidad de rasgos físicos (color del pelo, de la piel, quedarse o no calvo, etc.) pero parece que cuando se trata de rasgos "mentales"cuesta mas de digerir aunque se acepte que hay gente mas tranquila, mas o menos conformista, mas o menos inquieta, etc. Es poco cuestionable que ciertos rasgos de carácter que vienen de nacimiento facilitan la actitud emprendedora. ¿Puede de lo anterior afirmarse que los emprendedores son una "raza"?. Pues ya sería demasiado y aquí hay que irse al concepto de "triple hélice" acuñado por el biólogo Richard Lewontin para aludir que a la doble hélice del ADN hay que añadir la tercera hebra del ambiente. En su conjunto esa triple hélice determina la conducta. Así que una persona con ADN no emprendedor podrá mejorar sus aptitudes si el ambiente-educación son apropiados. Y, a la inversa, una persona con ADN radicalmente emprendedor podrá resultar un perfecto funcionario en un entorno apropiado. Se puede argumentar que con este razonamiento estamos como al principio. Pero no es así. El eje del argumento es que cada uno debe conocerse razonablemente para potenciar aquellos aspectos para los que esta mas dotado y no para los que no lo está, porque si se hace esto último es fácil concluir con alto grado de frustración. Y desde el punto de vista colectivo lo propio es cultivar en la gente aquello para lo que cada cual esta mas dotado, como en el deporte, porque lo contrario puede suponer un dispendio inútil de recursos y, otra vez, generación de frustración. No hay que soñar con una sociedad de emprendedores, sino con una sociedad en la que los emprendedores vean facilitado su desarrollo, porque será en beneficio de todos. Pero igualmente, en esa sociedad habrá gente sin vocación de emprender pero a cargo de funciones igualmente importantes como consolidar y salvaguardar los avances de 8 a 3. Se que es una sobresimplificación pero ya es bastante extenso este post.
Andrés, tras compartir tu publicación y, leyéndola a fondo, te diré que no superar el miedo y no abrirme a las NN.TT, era el handicap fundamental con el que yo contaba y que hacía de mí una nulidad. Gracias a tí, permíteme que lo diga, estos miedos se superaron y ahí estoy, no se si tendré tiempo por mi edad, intentando un aprendizaje que estoy seguro va a cambiar mi vida. Gracias, Profesor.