Google Maps como medio de prueba en los tribunales

Las nuevas tecnologías han irrumpido en nuestro día a día, y en consecuencia, en nuestra forma de trabajar. Un ejemplo de ello es el aumento de los casos en los que, como prueba en los juicios, se aportan imágenes extraídas de Google Maps.

El uso de esta aplicación de Google es un elemento de prueba muy preciso para acreditar las distancias entre un punto y otro, y si las imágenes son muy recientes, también se puede acreditar el estado de una carretera, de un edificio, o una señal de tráfico.

El hecho de que se trate de un documento no oficial no es óbice para que los jueces den crédito a la información que proporcionan, y confíen en los datos que ofrecen. Es evidente que las nuevas tecnologías han irrumpido en todos nuestros ámbitos para quedarse.

 

Prueba en procesos laborales

El aumento de este tipo de pruebas se da sobre todo en casos de litigios laborales, sobre todo aquellos relacionados con la movilidad geográfica. donde se ha de probar las distancias entre un centro u otro, para que se aplique, por ejemplo, una compensación por el incremento de distancia desde el domicilio de los trabajadores hasta el centro de trabajo. En estos casos, la distancia con Google Maps es muy precisa si se aplica de puerta a puerta. 

Incluso en procesos de despido por movilidad geográfica la aplicación de Google Maps ha llegado a contradecir a los GPS incorporados a los vehículos.

Esta aplicación no sólo mide la distancia, sino también, el tiempo empleado para acudir de un lugar a otro, utilizando diversos medios de transporte y distintas rutas.

 

Prueba en otros procedimientos

No obstante, esta prueba también se utiliza en otro tipo de procedimientos. Por ejemplo, en casos derivados de la Ley 57/68 de 27 de julio, sobre percibo de cantidades anticipadas en la construcción y venta de viviendas, uno de los hechos controvertidos es demostrar que la vivienda adquirida por los compradores, no se llegó a construir. La herramienta de Google Maps, que indica también el año en que se han tomado las imágenes, puede demostrar el estado en que se encuentra una vivienda, si está construida o si hay gente viviendo en ella.

Asimismo, en esta clase de procedimientos, también es importante determinar el uso que pretendían darle los compradores a la vivienda que adquirieron, pues se debe demostrar que era para uso propio. La distancia entre el domicilio habitual y la vivienda que adquirieren objeto de litigio, también es un indicio para determinar el uso que pretendían darle a la vivienda. Con Google Maps se puede probar la distancia entre los domicilios, así como el tiempo que se tarda en ir de uno a otro.

 

En definitiva, los jueces están teniendo muy en cuenta este tipo de pruebas por considerarlas, además, objetivas y razonables, y cada vez son más los procedimientos en los que irrumpen. No obstante, siempre hay alguna que otra reticencia a las nuevas tecnologías.


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