El Centro de Investigación de la Australian Wool and Sheep Cooperative (cooperativa ovina y lanar australiana) está experimentando con un nuevo filtro solar basado en nanotecnología diseñado para proteger la lana de los rayos UV.
A diferencia del algodón o las fibras sintéticas, la lana tiende a ponerse amarilla mientras se procesa y después de lavarla y usarla a la luz del día.
El director del programa, David Tester afirma que es posible seleccionar la lana más blanca y luego evitar que se ponga amarillenta durante el procesamiento y el uso.
«Hemos cruzado los dedos y esperamos que sea así, porque si podemos lograr ambas cosas y hacer que sea más fotoestable, entonces podremos tener un producto que compita con el algodón y el poliéster en el ámbito de la ropa en el que se centra nuestra investigación», añadió.
Fuente: ABC
