A medida que se intensifica el debate entre los pro y los contra de la nanotecnología, la Comisión de Asuntos Sociales, Salud y Desarrollo Sostenible de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE) ha propuesto que dicho Consejo elabore unas normas jurídicas destinadas a proteger a los ciudadanos, fomentando al mismo tiempo los posibles usos beneficiosos de la nanotecnología.
En un proyecto de informe (pdf) presentado por Valeriy Sudarenkov (de la Federación rusa), la Comisión reconoce su potencial de enormes beneficios (especialmente en el campo de la medicina), pero también expresa su preocupación sobre los aún poco conocidos peligros para la salud pública y el medioambiente, a pesar del hecho de que la nanotecnología se utilice ya ampliamente en aplicaciones comerciales (como los productos de protección solar).
El proyecto de informe recomienda, por lo tanto, la elaboración de directrices basadas en el principio de precaución. Debería ser posible aplicar estas directrices de manera sistemática, independientemente del origen de los nanomateriales en cuestión, y ayudar a armonizar la normativa vigente, especialmente en lo que respecta a la evaluación de riesgos y métodos de gestión de riesgos, la protección de los investigadores, la información y protección de los consumidores y los requisitos de inscripción y presentación de informes.
