Mientras que los recientes avances en neurocirugía han permitido a los equipos médicos apuntar a zonas del cerebro con una invasividad mínima, ha habido problemas con la cantidad de visibilidad que permite la cirugía laparoscópica de este tipo.
El tamaño de las incisiones que dejan las sondas, agujas o catéteres (utilizados en este tipo de procedimientos) es a una escala que puede limitar las maniobras de los cirujanos.
Ahora, sin embargo, un robot en miniatura desarrollado por un investigador de la Universidad Hebrea de Jerusalén podría ofrecer la solución. El diminuto dispositivo funciona guiando los procedimientos quirúrgicos con un nivel de precisión y seguridad sin precedentes.
La cirugía cerebral tradicional por laparoscopia, realizada a partir de imágenes de TC y IMR, deja lugar al posicionamiento erróneo de instrumentos quirúrgicos pudiendo dar lugar a hemorragias y complicaciones graves. La solución, ofrecida por el Prof. Leo Joskowicz y los estudiantes de doctorado Ruby Shamir y Moti Freiman de la Facultad de Ingeniería e Informática de la Universidad Hebrea, permite a los cirujanos trabajar a partir de un sistema guiado por imágenes capaz de dirigirse automáticamente y con precisión hacia estructuras del cerebro localizadas mediante escáneres preoperatorios de la cabeza del paciente.
Fuente: Scenta