viernes, diciembre 22, 2006

Sistema para quitar hielo de los parabrisas

Un recubrimiento de nanotubos podría eliminar el hielo de los parabrisas de los coches

Según un artículo publicado el 21 de diciembre de 2006 en NewScientist.com, una laca transparente con nanotubos de carbono podría limpiar los parabrisas de los coches y las ventanas actuando como un calefactor. Asimismo, según los investigadores, versiones más gruesas y opacas de este recubrimiento podrían convertir plantas enteras de edificios en radiadores.

La laca, que consiste en una base líquida con una mezcla de nanotubos que conducen la electricidad, se puede aplicar en spray sobre cualquier superficie. A medida que el líquido se seca, los nanotubos forman una red conductora dentro de la laca. A continuación, basta con hacer pasar una corriente a través de esta red, para calentar la capa.

En las pruebas, un recubrimiento conectado a una fuente de energía de 12 voltios, similar a la de la batería de los coches, fue capaz de eliminar el hielo de una lámina de plástico en dos minutos, aunque la lámina de la prueba era solo del tamaño de la tapa de un libro.

Dominik Nemec está trabajando en este recubrimiento con su colega Ivica Kolaric en el Fraunhofer Technology Development Group en Stuttgart, Alemania.
El equipo espera que esta tecnología reemplace a los filamentos calefactores incorporados en los parabrisas de los coches (lunas térmicas convencionales). Además de proporcionar un calor más uniforme que el de los filamentos, la película de nanotubos es más resistente a los daños, afirma Nemec. "Si se rompe un filamento deja de funcionar todo el calefactor", señala, pero "esta nueva película puede tener agujeros, por accidente o por diseño, y seguiría funcionando".

Si se añaden más nanotubos a la laca, el material puede producir más calor, pero se vuelve opaco.

Según Nemec, este recubrimiento se podría utilizar también como calefacción bajo el suelo. 1m2 de película de unos 0,3mm de grosor produce 15kv de calor, suficiente para calentar un hall bastante grande.

Fuente: New Scientist
posted by Euroresidentes at 10:04 AM