Los Templarios están entre nosotros

Autor: Gérard de Sède
Título: Los Templarios están entre nosotros
Editorial: Sirio, S.A., 1ª Edición Junio 1985
ISBN: 84.86221-05-6

Este libro hace un interesante análisis sobre Los Templarios: quiénes eran, su historia, los acontecimientos que los encumbraron y los que los llevaron a su exterminio y de que forma tuvieron que esconder su tesoro, que tantas investigaciones y tantas historias se han escrito sobre él. Todo ello para contarnos la historia de como el Castillo de Gisors alberga (hipotéticamente) desde el siglo XIV, el tesoro y el secreto de los Templarios. De como Roger Lhormoy, un ex-seminarista, que había podido leer al respecto, se ofrece como jardinero y guardián en ese castillo, para así poder cavar y oradar la tierra, en busca de dicho tesoro.

El azar quiso, que este hombre fuera a ofrecer sus servicios a la finca de Gérard de Sède, ex-periodista emparentado con el Papa Clemente V, quien al conocer toda la historia del Castillo, se ofrece para seguir con las investigaciones, los permisos y las excavaciones. Finalmente se extrajo un tesoro, pero ¿era realmente el tesoro de los Templarios?

La historia de los Templarios se ha convertido en una leyenda, que a través de los tiempos ha ido creciendo convirtiéndose en mítica y enigmática. Está llena de incógnitas. La Orden del Temple se creó sobre el año 1118 en Francia. Se extendió por Europa y por Tierra Santa. Era una Orden muy poderosa tanto militarmente como religiosamente. Ha estado siempre rodeada de secretismo y de dobles sentidos, para preservar su intimidad y su verdad. Eran los guardianes del Santo Grial (verdadero cáliz de Cristo) y todo en ellos era enigmático. Todo tenía un doble sentido.

En el año 1128, la Iglesia Católica los reconoce como tales y en el Concilio de Troya les da sus estatutos, que consistía en el triple voto de pobreza (castidad, pobreza y obediencia). Con ello adquirieron una serie de privilegios, que con el tiempo contribuyeron a poder engrosar sus arcas y convertirse en poderosos. Véase estar excentos de pagar impuestos, pero en cambio si podían recibirlos. No debían dar cuentas a nadie, estaban bajo las ordenes directas del Papa. En el siglo XIV eran una gran potencia, envidiada por todos.

Estos monjes soldados crearon el reino cristiano de Jerusalén y mediante las cruzadas pretendían conquistar militarmente, someter y cristianizar los territorios, para así establecerse económicamente y aumentar su poder. Eran hábiles, fuertes y valientes, pero fracasaron únicamente con un error de cálculo. Pensaban, que los infieles serían unos bárbaros y en realidad era una civilización mucho más avanzada, que la suya. La civilización Islámica durante la Edad Media estaba en su máximo apogeo.

Varios monarcas europeos se vieron involucrados en las cruzadas y pretendían, unos luchar con Francia y Alemania, para reconquista Tierra Santa; y otros como Inglaterra, querían aliarse con Saladino, con los mismo fines. LO que sí consiguieron los Templarios fue un interesante intercambio económico, que les benefició.

El poder de los Templarios fue inmenso, se convirtieron en banqueros de todos los países y monarcas europeos. Pero en el año 1307 un rey loco, impío y avaro, Felipe el Hermoso (hijo de San Luis) los destruyó, para quedarse con todas sus posesiones y dinero. Para ello enfrenta a todos los monarcas y al Papa y pretende ponerlos a todos contra la Orden. Los encarcela y los acusa de herejes. El 18 de Marzo de 1314 los quema en la hoguera.

Por lo tanto una Orden, que desapareció hace más de 6 siglos, sigue dando de que hablar y sigue interesando a los lectores y novelistas, que encuentran en Los Templarios, un tema interesante, para desarrollar sus relatos. Sin embargo, a lo largo de los siglos, han sucedido cosas, que hacen pensar, que Los Templarios nunca desaparecieron del todo y que siguieron en la sombra practicando sus rituales y viviendo entre nosotros. Para muchos, aún hoy, siguen entre nosotros.

Para mí es un libro buenísimo y muy interesante, si le gusta el tema, ya que está muy bien documentado y no deja de ser testigo de la historia. Una historia real sobre la búsqueda de un tesoro, que resultó real (aunque sólo fuera una pequeña parte de él). Decir esto del año 1974, que es cuando se desarrolla la historia, parece increíble, pero es cierto. ¿Pero era ese realmente el tesoro de la Orden del Temple? o por el contrario ¿Ellos siguen entre nosotros y el tesoro estaba en otro lugar escondido? Como pueden ver siguen las incognitas...

Assumpta Ricart