No es ningún secreto que Puerto Rico es una de las islas con más encanto del planeta.
Para todas las edades, la isla ofrece desde olas de siete metros a aguas cristalinas perfectas para bucear o pasar el día en familia. Y es que, sus playas vírgenes poco frecuentadas por turistas, dan la impresión de ser lo más parecido al paraíso.
Pero, que no os engañen, Puerto Rico ofrece mucho más que sol y playa. De hecho lo especial de la isla no es eso, sino la increíble mezcla de paisajes tan diferentes que nunca habías pensado que se podían complementar tan sumamente bien.
Desde un viaje al pasado en El Morro, a rodearse de lo contemporáneo en la Calle del Cristo, desde la increíble jungla de El Yunque, a las cuevas espectaculares del Parque de las Cavernas del Río Camuy.
Y si de verdad vas en busca de una experiencia única, alejarte de la civilización y descubrir lo que se siente al estar en una isla desierta, puedes visitar las increíbles islas de Vieques y Culebra.
Si lo que te preocupa es el precio, aquí tienes algunos trucos para que el viaje te salga lo más barato posible:
- Compra tus billetes con bastante antelación, por lo menos 3 o 4 meses antes del esperado viaje.
- Intenta evitar ir en temporada alta (junio, julio, agosto..)
- Un buen mes para viajar es septiembre, cuando muchos ya han vuelto de sus vacaciones y los precios han bajado. (A día de hacer este post, se puede reservar ida y vuelta por 448 euros/persona en iberia desde el 1 al 7 de septiembre)
- Haz un plan de viaje muy bien organizado e infórmate antes de ir. Los mejores restaurantes, hoteles y las visitas turísticas todo mirando la relación calidad/precio.
Ahora, vamos con lo mejorcito de la isla.
Todo lo mencionado en la introducción es lo que, si vas a Puerto Rico, es obligatorio visitar.
Sí, las playas son tentadoras y te costará levantarte de tu tumbona para ir a visitar estos lugares, pero de verdad que merece la pena. Pero te queda lo mejor…
La jungla de El Yunque, una verdadera obra de arte de la naturaleza con la que uno se lo puede pasar en grande. Lo único negativo de este atractivo es la cantidad de mosquitos que hay, así que es muy recomendable llevarse repelente y estar preparado mentalmente para ver unos mosquitos gigantescos.
El Parque de las Cavernas del Río Camuy, de lo más espectacular que se puede ver en la isla. También tenemos que agradecer a la naturaleza que nos deleitase con obras de arte como las cuevas que se pueden visitar en Puerto Rico. Especialmente la famosa Cueva Ventana, a través la cual se ve un precioso paisaje y es cada vez más frecuentada por turistas y amantes de la fotografía.
Por encima de todo, hay una cosa que es esencial si vas a ir a Puerto Rico. Hay que ir con ganas de descubrir, sin juzgar y con la mente abierta.
Es como otro mundo, la gente amable y una mezcla de culturas muy interesante. La gente que vive ahí está contenta de tener a los turistas, pero hay que respetar sus culturas, religiones y su forma de ser.
Lo más precioso de un viaje como este es, después de un largo día en la playa descansando, o después de haber visitado la jungla o las cuevas, dar un largo paseo con el atardecer por las calles de San Juan y contemplar las pequeñas casa con encanto y la gente amable y acogedora.
Comer comida típica en puestos de la calle, disfrutar de los restaurantes tradicionales e integrarse lo máximo que se pueda.
